Las ventajas de la crianza bilingüe para los niños, que han sido contrastadas en diversos estudios, se pueden resumir en:
- El desarrollo bilingüe aumenta a su vez la atención selectiva del niño, la capacidad de abstracción, la concentración en los detalles de importancia descartando los aspectos superfluos de una situación, y ayudando a la capacidad resolutiva del mismo. El poseer dos palabras para el mismo concepto estimula la flexibilidad mental.
- La persona bilingüe domina la conciencia del lenguaje como sistema, lo que favorece el aprendizaje de otros idiomas, además del perfecto conocimiento y la destreza en la lectura de los dos propios.
- El conocimiento y dominio de dos o más lenguas favorece la obtención de buenos resultados en el ámbito académico y en la búsqueda de trabajo cualificado.
- Se estimula la capacidad de comprensión de otras culturas diferentes a la propia.
- Algunas investigaciones han demostrado que el bilingüismo retrasa la aparición del alzhéimer y del deterioro cognitivo.
En definitiva, la crianza bilingüe es una opción muy positiva en la que la interacción humana es el mejor medio de conseguirla y donde el papel de los padres, creando un entorno que facilite la inmersión del niño en los dos idiomas de forma espontánea y natural, es fundamental.