Asocian la adicción al tabaco con la genética

Un grupo de científicos ha identificado un perfil de riesgo genético que favorece que un individuo que comience a fumar durante la adolescencia se enganche antes al tabaco y le resulte más difícil dejar de fumar.
Fumadores de tabaco

Un grupo de científicos ha identificado un perfil de riesgo genético que favorece que un individuo desarrolle adicción al tabaco. Los investigadores realizaron un estudio cuyo objetivo era comprobar si las personas que presentan determinados factores de riesgo genético y comienzan a fumar durante la adolescencia se enganchan antes al tabaco, y si cuando llegan a adultos les resulta más difícil dejar de fumar.

PUBLICIDAD

Para determinar los factores de riesgo genético que aceleran la adopción del hábito tabáquico, los investigadores escanearon los genomas completos de miles de fumadores para detectar las variantes que se repetían con más frecuencia en los que más fumaban. Estas variantes intervienen en la respuesta del cerebro a la nicotina y en la forma en que ésta se metaboliza.

De esta forma, los autores del estudio elaboraron una ‘puntuación de riesgo genético’ con la que consiguieron predecir las posibilidades que tiene un individuo de convertirse en un gran fumador, y aplicaron esta fórmula en una muestra de 1.000 neozelandeses, a los que siguieron desde el nacimiento hasta los 38 años de edad. Observaron que los participantes que presentaban un perfil genético de alto riesgo eran más propensos a consumir cigarrillos a diario durante su adolescencia y tenían una mayor tendencia a fumar en exceso (un paquete o más al día).

Los individuos con un perfil genético de alto riesgo habían desarrollado dependencia de la nicotina con más frecuencia, y habían fracasado más veces al intentar dejar de fumar

Cuando los investigadores evaluaron a los mismos voluntarios a los 38 años, comprobaron además que los individuos considerados genéticamente de alto riesgo habían estado fumando durante más tiempo, era más frecuente que hubieran desarrollado dependencia de la nicotina, y también habían fracasado más veces cuando habían intentado dejar de fumar, en comparación con las personas que no tenían riesgo genético.

PUBLICIDAD

De acuerdo con los resultados del estudio –que se ha publicado en ‘JAMA Psychiatry’ y ha contado con el apoyo financiero de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, el ‘UK Medical Research Council y el ‘New Zealand Health Research Council’– el hecho de que un individuo tenga un perfil de riesgo genético no significa que esté predestinado a fumar pero, en el caso de que pruebe el tabaco, tiene mayores posibilidades de convertirse en fumador habitual y un mayor riesgo de desarrollar dependencia de la nicotina.

PUBLICIDAD

Actualizado: 1 de agosto de 2017

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD