Cosmetogenómica, genética versus envejecimiento

La cosmetogenómica es un plan antiaging personalizado, basado en un estudio del perfil genético del individuo para recomendar cambios en el estilo de vida que ayuden a retrasar los signos del envejecimiento.
Cosmetogenómica, genética versus envejecimiento
Medicina genómica para frenar el envejecimiento
Eva Salabert

Por: Eva Salabert

Periodista experta en salud

Actualizado: 22 de septiembre de 2022

La edad biológica –la que tienen nuestros órganos y capacidades cognitivas– y no los años que hayamos cumplido, es la que determina la longevidad y la calidad de vida. Los avances de la ciencia han permitido aumentar la esperanza de vida del ser humano, y ahora la medicina genómica, que analiza el genoma y detecta los puntos débiles de cada persona para prevenir el desarrollo de las patologías a las que sea propensa, contribuirá a disminuir las enfermedades asociadas al envejecimiento.

PUBLICIDAD

La medicina genómica, además, también puede aplicarse a las terapias antiaging para reducir y retrasar los signos exteriores del envejecimiento –algo que a todos nos preocupa–, y que es lo que se conoce como cosmetogenómica: un conjunto de tratamientos enfocados a mantener un buen estado físico e intelectual durante el mayor tiempo posible.

El envejecimiento de los tejidos está relacionado con factores genéticos y ambientales, sobre todo el tipo de alimentación, la exposición a la contaminación ambiental y a sustancias tóxicas, y las radiaciones ionizantes que recibimos. Nuestro organismo dispone de mecanismos de eliminación de tóxicos pero, cuando estos se bloquean, comenzamos a acumular radicales libres, que al unirse al ADN, lípidos y proteínas, originan moléculas disfuncionales y provocan un envejecimiento prematuro.

PUBLICIDAD

Cosmetogenómica: plan antiaging personalizado

El tratamiento antiaging consiste en un plan de salud personalizado que se basa en un perfil de envejecimiento del  individuo. Para identificarlo, se realizan una serie de pruebas diagnósticas como análisis de sangre, orina, hormonas o saliva, ecografías y radiografías, que se emplean para analizar diversos parámetros bioquímicos individuales que se compararán con los de la media poblacional y, de esta forma, determinar la edad biológica de esa persona.

Se evalúan también el riesgo cardiovascular y oncológico, las funciones respiratoria, renal, y hepática, o las alteraciones osteo-articulares, así como el estilo de vida: hábitos dietéticos, actividad física, composición corporal, etcétera. El test genómico, por último, permite estudiar el ADN del paciente a través de una muestra de sangre, y posteriormente se realizan cultivos celulares que comprueban el envejecimiento celular de los tejidos, y se analizan los genes que intervienen en dichos procesos de envejecimiento.

El plan antiaging personalizado incluye recomendaciones para mejorar los hábitos de nutrición, suplementos dietéticos, fármacos, o nutracéuticos, y para establecer un programa adecuado de ejercicio físico y mental

Con todos estos datos los especialistas establecen un plan personalizado de salud que incluye recomendaciones para mejorar los hábitos en relación a la nutrición (nutrigenómica), suplementos dietéticos, fármacos, nutracéuticos, y establecer un programa adecuado de ejercicio físico, y de ejercicios mentales para controlar el estrés y estimular la concentración y la memoria.

PUBLICIDAD

Como explica el Dr. Ramón Cacabelos, Presidente de la Asociación Mundial de Medicina Genómica, “tenemos la oportunidad de ser los pobladores de la tierra con la mayor esperanza de vida de toda la historia de la humanidad, y eso supone un reto sociosanitario, socioeconómico y científico”. Según este experto, la medicina genómica antiaging, que ayuda al organismo para que las células envejezcan lo más lentamente posible, contribuirá a superar esos retos previniendo enfermedades y “disminuyendo el grado de discapacidad de la población senil”.

Fuente: Centro Médico EuroEspes

Creado: 11 de febrero de 2014

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD