La biopsia testicular, clave en caso de alteración del semen

La biopsia testicular es una técnica de reproducción asistida que permite recuperar espermatozoides en casos de muy baja calidad del semen, para microinyectarlos en los ovocitos y conseguir un embarazo.
La biopsia testicular, clave en caso de alteración del semen
Cirujano practicando una biopsia testicular

El seminograma o espermiograma, una prueba que comprueba la calidad del semen analizando una muestra del mismo, puede detectar alteraciones como la oligozoospermia severa –concentración espermática muy baja–, o azoospermia –ausencia de células espermáticas–, datos que sirven al especialista para conocer el estatus fértil del varón y le ayuda a decidir la técnica de reproducción asistida más apropiada en su caso.

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En la actualidad, y según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) más del 30% de los seminogramas que llegan al laboratorio se encuentran dentro de la normalidad, mientras que dos tercios de los mismos tienen los parámetros alterados, y el 7% de estos presentan una muy baja concentración de espermatozoides, o incluso una falta de células espermáticas.

La biopsia testicular permite recuperar espermatozoides directamente del testículo, que después se microinyectan en los ovocitos extraídos para fecundarlos

Sin embargo ya existen técnicas disponibles para que incluso en estos casos más difíciles se consiga un embarazo, ya que como explica la Dra. Inmaculada García Cobaleda, Presidenta de la Comisión de Andrología y Técnicas de Reproducción Asistida de la Sociedad Española de Bioquímica Clínica y Patología Molecular (SEQC), a estos pacientes se les puede realizar una biopsia testicular que permite recuperar espermatozoides que después se microinyectan en los ovocitos extraídos a su pareja.

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Así, la biopsia testicular, además de tener un propósito diagnóstico –comprobar el funcionamiento de la producción de espermatozoides– que puede detectar una posible patología en el aparato reproductor masculino (por ejemplo si el conducto por el que salen se encuentra obstruido), se emplea para obtener espermatozoides directamente del testículo, y posteriormente utilizar los seleccionados en la técnica ICSI (microinyección intracitoplasmática de espermatozoides) –un método especialmente indicado para casos de esterilidad masculina grave– para conseguir un embarazo.

Fuente: Sociedad Española de Bioquímica Clínica y Patología Molecular (SEQC)

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Actualizado: 27 de febrero de 2017

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