El 10 por ciento de las personas que han desarrollado un herpes zóster continuará sufriendo dolor en la zona afectada durante el resto de su vida, según ha explicado José Luis Cañada, médico de Atención Primaria del Centro de Salud de Algorta, durante su ponencia en las III Jornadas de Actualización en Vacunas y Patología Infecciosa, organizadas por la UPV/EHU y la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao.

PUBLICIDAD

“El virus nunca se depura, queda acantonado en un ganglio espinal o un ganglio de los nervios de los pares craneales [...] lo que le confiere una especial gravedad a una segunda reactivación. Lo que realmente le confiere gravedad a este segundo episodio de la enfermedad es la neuralgia postherpética. Esta es muy duradera y a veces quedan dolores de por vida”, ha explicado el experto.

El herpes zóster evoluciona con un dolor que produce molestias intensas al paciente, de duración muy prolongada, pero con algunos periodos de remisión. “Esto se traduce en un grave empeoramiento de la calidad de vida, que repercute tanto a nivel personal como familiar y social”. Esta enfermedad se considera relevante por la edad del grupo poblacional afectado, ya que normalmente afecta a personas mayores de 50 años.

PUBLICIDAD

En cuanto a la eficacia de la vacuna para resolver el problema del herpes y la neuralgia postherpética en adultos mayores, el doctor Cañada ha señalado que redujo la carga de enfermedad en un 61 por ciento, y previno la neuralgia postherpética en el 67 por ciento de los casos.

Fuente: EUROPA PRESS

PUBLICIDAD

Actualizado: 25 de abril de 2017

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD