Controlar la grelina podría evitar el efecto rebote en las dietas

Una terapia génica basada en inactivar la grelina –una hormona que estimula el apetito– ha logrado que ratones sometidos a una restricción calórica estricta no recuperasen el peso (efecto rebote) tras volver a la dieta normal.
Persona con sobrepeso
La terapia génica basada en el gen BChE podría ayudar a desarrollar nuevos tratamientos para combatir la obesidad.

Científicos de la Clínica Mayo en Rochester (Estados Unidos), han probado una terapia génica en ratones con el objetivo de reducir los niveles de grelina, una hormona que se produce en el estómago y que interviene en los mecanismos que regulan el apetito, ya que estimula la sensación de hambre y, por lo tanto, también desempeña un importante papel en el aumento de peso y en la recuperación del peso perdido tras seguir una dieta de adelgazamiento, lo que se conoce popularmente como 'efecto rebote'.

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En el nuevo estudio, que se ha publicado en Proccedings of the National Academy of Sciences (PNAS), un grupo de ratones fueron alimentados con una dieta rica en grasa desde las ocho a las 20 semanas de vida, y posteriormente se les inyectó un virus adenoasociado que expresaba o bien la enzima butirilcolinesterasa (BChE) –que inactiva la grelina–, o bien una enzima control (luciferasa), y todos ellos fueron sometidos a una dieta con un 40% menos calorías, lo que provocó que perdieran bastante peso.

Los ratones tratados con la terapia génica tendían a consumir menos calorías y a coger menos peso tras abandonar la dieta restrictiva

Tras seguir este régimen alimenticio durante tres semanas, nuevamente se les administró una dieta rica en grasa, y los investigadores comprobaron así que los ratones a los que se les había inyectado el virus con la enzima BChE continuaron expresando elevados niveles de butirilcolinesterasa en la sangre y bajas concentraciones plasmáticas de grelina acilada, la forma activa de esta hormona. Estos animales, además, tendían a consumir menos calorías y a coger menos peso tras abandonar la dieta restrictiva, y su tolerancia a la glucosa era mayor.

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Una terapia génica que podría ayudar a combatir la obesidad

En investigaciones previas se ha comprobado que los niveles de grelina acilada caen rápidamente cuando una persona se somete a una dieta con una severa restricción calórica, pero que cuando finaliza dicho régimen se produce un efecto rebote, que facilita que se recupere el peso perdido. La grelina acilada es la más activa –la otra forma es la desacilada– y la que más favorece el aumento del apetito y la ganancia de peso, y se ha observado que las personas obesas suelen tener muy reducida la grelina desacilada, e igual, o incluso aumentada, la acilada, y que a medida que aumentan sus condiciones para padecer síndrome metabólico, también lo hacen sus niveles de grelina acilada.

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Los autores del nuevo trabajo consideran que los resultados obtenidos sugieren que la terapia génica basada en el gen BChE podría ayudar a desarrollar nuevos tratamientos para combatir la obesidad. Como ha explicado Stephen Brimijoin, director del estudio, explica que aunque todavía es pronto para pronosticar cómo serían las aplicaciones terapéuticas de esta técnica en los seres humanos, si se comprueba su seguridad, podría llegar a utilizarse en las personas que sufren los casos más graves de obesidad y que no logran mantener un peso corporal saludable.

Los expertos recuerdan, sin embargo, que existen muchos otros factores implicados en el efecto rebote, además de la grelina, como son otras hormonas que también intervienen en la regulación del apetito o factores secretados por el intestino, además de elementos ambientales o psicológicos, por lo que resulta fundamental adoptar hábitos de vida saludable –basados en aprender a comer y realizar ejercicio físico– que se mantengan tras finalizar la dieta.

Actualizado: 4 de mayo de 2023

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