Asocian déficit de vitamina D y cáncer de próstata

Un estudio revela que los varones con factores de riesgo para desarrollar cáncer de próstata, que además presentan un déficit de vitamina D, tienen más posibilidades de sufrir una forma agresiva de la enfermedad.
Hombre mayor tomando vitamina D
Un hombre toma un suplemento de vitamina D para suplir su déficit

Los varones con un alto riesgo de desarrollar cáncer de próstata tienen más posibilidades de que les diagnostiquen una forma agresiva de esta enfermedad si sufren un déficit de vitamina D, según datos de un nuevo estudio que han llevado a cabo la Universidad de Northwestern y la Universidad de Illinois de Chicago (UIC), en Estados Unidos.

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Como ha explicado Adam B. Murphy, profesor asistente de Urología en la Escuela de medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern y médico en el Centro Médico Jesse Brown, la falta de vitamina D podría considerarse un biomarcador de la progresión del cáncer de próstata avanzado en amplios sectores de la población. Este experto aconseja que se compruebe el nivel de esta vitamina en los hombres y se trate su carencia.

Los hombres con un alto riesgo de desarrollar cáncer de próstata tienen más posibilidades de que les diagnostiquen una forma agresiva de la enfermedad si sufren un déficit de vitamina D

En el estudio participaron alrededor de 600 hombres que presentaban elevados niveles de PSA o antígeno específico de la próstata u otros factores de riesgo para desarrollar cáncer de próstata. Antes de realizarles una biopsia de próstata, se comprobó si presentaban déficit de vitamina D, y los investigadores observaron que la deficiencia de este micronutriente parecía ser un predictor del diagnóstico de las formas más agresivas de este tipo de cáncer en hombres afroamericanos y europeo-americanos.

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Los datos de la investigación revelaron que los varones europeo-americanos y afroamericanos con una severa deficiencia de vitamina D tenían 3,66 veces y 4,89 veces más posibilidades de tener cáncer de próstata agresivo, respectivamente, incluso teniendo en cuenta la influencia de otros factores como el consumo de tabaco, la alimentación, los antecedentes familiares o el exceso de peso.

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Actualizado: 27 de febrero de 2017

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