Tratamiento de la lipodistrofia

El tratamiento de la lipodistrofia debe abarcar varias medidas para poder solucionar todas las alteraciones que este problema implica en el organismo:

• Cirugía plástica: existen operaciones, con o sin prótesis, que pueden ayudar a restaurar el volumen en la cara y los glúteos. Y también se puede quitar el exceso de grasa donde no debería haberla, así como reducir el tamaño de las mamas en los varones. Es importante acudir a profesionales expertos que realicen un trabajo adecuado para obtener buenos resultados.
• Ajuste del tratamiento antirretroviral: cambiar antiguos fármacos contra el VIH por otros más novedosos reduce el porcentaje de riesgo de padecer lipodistrofia, y ayuda resolverla en los pacientes que ya la presentan.
• Estatinas y fibratos: son dos medicamentos cuya función principal es disminuir el nivel de colesterol y triglicéridos en sangre; su uso es esencial para evitar la progresión de las complicaciones por lipodistrofia.
• Control de las glucemias: regular los niveles de glucosa en sangre es esencial para disminuir el riesgo cardiovascular. Se pueden utilizar fármacos orales, como la metformina y otros, o también insulina inyectada. Algunos antidiabéticos del grupo de las glitazonas han demostrado ser eficaces para corregir incluso las deformidades de la lipodistrofia en la cara cuando se utilizan de forma prolongada.
• Hormona del crecimiento sintética: existen medicamentos análogos a las hormona de crecimiento humana (GH) que han demostrado ser capaces de corregir la lipodistrofia corporal (‘joroba de búfalo’, grasa abdominal, pectoral y atrofia de cara y nalgas). Su uso no está muy extendido, pero se está investigando su utilidad.