Shigelosis
La infección por Shigella o shigelosis es la gastroenteritis con mayor riesgo de contagio, y su principal síntoma es la diarrea, que puede llegar a ser grave. Unas correctas medidas higiénicas ayudan a prevenirla y a recuperarse.

Síntomas y diagnóstico de la shigelosis

Doctor Miguel Vacas

Por: Dr. Miguel Vacas Córdoba

Especialista en Medicina Interna del Hospital Universitario Príncipe de Asturias

Actualizado: 29 de julio de 2022

El período de incubación de la shigelosis, que es el tiempo comprendido entre la exposición a la bacteria Shigella y la aparición de los síntomas, oscila entre uno y siete días.

Los síntomas más frecuentes de la infección por Shigella son:

  • Diarrea: es el síntoma principal en la shigelosis, y varía desde una diarrea moderada hasta una disentería grave. La disentería es una enfermedad infecciosa caracterizada por una inflamación del intestino, especialmente del colon, que produce una diarrea grave con presencia en las heces de moco, sangre o pus.
  • Dolor abdominal de tipo cólico.
  • Fiebre (temperatura corporal superior a 38ºC).
  • Náuseas y vómitos.

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La enfermedad generalmente se autolimita en una semana, produciéndose la desaparición progresiva de los síntomas hasta su resolución total.

La complicación de la shigelosis más frecuente es la deshidratación grave, como consecuencia de una pérdida excesiva de líquidos y electrolitos acompañada de una incorrecta reposición de éstos. Es más frecuente en niños de corta edad y en ancianos, en los que suele ser necesaria la hospitalización para mantener una mayor vigilancia y realizar un mejor control del tratamiento.

Dolor abdominal por shigelosis

Aunque son raras, la infección por Shigella puede producir complicaciones a nivel extraintestinal. En los niños (especialmente en los menores de dos años) también pueden ocurrir convulsiones secundarias a la fiebre. Otros síntomas menos frecuentes son la artritis o la afectación ocular.

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Diagnóstico de la shigelosis

La anamnesis (entrevista clínica realizada por el médico sobre la sintomatología del paciente) y la presencia de síntomas compatibles con una infección por Shigella son requisitos necesarios para realizar un primer enfoque diagnóstico de la enfermedad. La exploración física no suele ser de gran utilidad, ya que es muy variable de un paciente a otro, y no suelen existir signos característicos que permitan sospechar una shigelosis.

En el examen microscópico de las heces pueden observarse abundantes glóbulos rojos y glóbulos blancos. El diagnóstico definitivo de la infección por Shigella se realiza mediante coprocultivo (cultivo de heces), que ofrece mejores resultados en los primeros días de la enfermedad, y la posterior identificación bioquímica y antigénica del microorganismo.

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Creado: 13 de diciembre de 2013

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