¿Qué nos quita el sueño?

Actualizado: 27 de noviembre de 2019
Si duermes el mismo número de horas que siempre pero cuando te levantas te sientes cansado, o si te cuesta trabajo conciliar el sueño y a lo largo de la noche te despiertas con frecuencia es muy posible que padezcas problemas de insomnio.
Respecto a las causas que producen que no descansemos adecuadamente se encuentran algunas a las que podemos poner solución de una forma bastante sencilla como son, entre otras:
- El tamaño de la cama: el colchón perfecto es el que tiene 20 centímetros más de largo que nosotros, y de ancho, si duermes solo, basta con 90 cm., pero si la cama es para dos, debe tener 1’60 cm.
- La dureza del colchón: debe dejar que nuestro cuerpo se hunda ligeramente, pero, al mismo tiempo, mantener la posición horizontal natural.
- El tipo de almohada: la ideal es aquella almohada que, cuando nos tumbamos boca arriba, hace que nuestro cuello no se tuerza y permanezca en una posición paralela al colchón.
- El ruido o la temperatura excesivos.
- Comer poco o, por el contrario, demasiado.
- Fumar mucho.
- Abusar del alcohol y de las bebidas con cafeína.
En los dos últimos casos, bastará con que mejoremos nuestros hábitos alimenticios y las condiciones del espacio en el que dormimos para que el descanso sea suficientemente satisfactorio. Sin embargo, si mejoramos dichas condiciones y la dificultad para dormir persiste puede que esto se deba a que existen otras causas subyacentes como, por ejemplo, problemas psicológicos o emocionales, ansiedad, estrés o depresión. En cualquiera de estas vicisitudes, habrá que optar por un tratamiento médico especializado para solucionar nuestros problemas de sueño.
Nunca deberemos recurrir por cuenta propia a tomar medicamentos para dormir si no nos los ha recetado previamente un médico. A pesar de que nos ayuden a conciliar el sueño, si no se toman en las dosis adecuadas y si dicha ingesta no se realiza bajo la supervisión de un facultativo, este tipo de fármacos tienen numerosos efectos secundarios, como son la aparición de cansancio, irritabilidad o incluso pueden llegar a producir adicción.
Creado: 16 de mayo de 2012