La fertilidad masculina se ve afectada por factores como el tabaco, el estrés o el sobrepeso, y un nuevo estudio –que se ha publicado en la revista Fertility and Sterility– señala que también desempeñar un trabajo físicamente exigente, sufrir hipertensión, y el consumo de determinados medicamentos, pueden deteriorar la calidad del semen.
Durante un año los investigadores siguieron a 465 varones estadounidenses con una media de 31,8 años de edad, que todavía no tenían hijos y estaban intentando concebir. Las muestras de semen revelaron que el 8% de ellos presentaban oligospermia, es decir, un semen de baja calidad.
El tipo de dieta, el consumo de tóxicos como tabaco y alcohol, los medicamentos, el estrés, la contaminación, e incluso la exposición a fuentes de calor excesivas, pueden alterar la calidad del semen
El 13% de los hombres con una actividad profesional que implicaba un intenso trabajo físico tenían una cantidad de espermatozoides inferior a lo normal, algo que también le sucedía al 15% de los que tomaban dos o más fármacos con regularidad –cuyo nivel era inferior a 39 millones de espermatozoides por mililitro (lo normal es tener entre 40 y 300 millones por mililitro)–, en comparación con el 7% de los que no se medicaban.
Los especialistas señalan que diversos factores externos, desde el tipo de dieta y el consumo de tóxicos como el tabaco y el alcohol, al estrés, la contaminación ambiental, e incluso la exposición a fuentes de calor excesivas, pueden alterar el semen. En el caso de la hipertensión, que también se menciona en el estudio como un factor de riesgo, esto podría deberse a que hubiese problemas de circulación sanguínea a nivel del testículo.