La vitamina D alivia el dolor del síndrome del intestino irritable

El síndrome del intestino irritable (SII) es una enfermedad bastante frecuente que afecta a alrededor del 8% de la población española, y cuya aparición se asocia a muy diversas causas, desde una susceptibilidad genética o trastornos psicológicos, hasta infecciones, procesos inflamatorios, o alteraciones de la motilidad gastrointestinal. Un nuevo metaanálisis señala, además, que las personas que padecen este síndrome suelen presentar un déficit de vitamina D.

Las conclusiones del estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Sheffield (Reino Unido), y que se ha publicado en European Journal of Clinical Nutrition, indican que administrar suplementos de vitamina D a estos pacientes puede contribuir a aliviar el dolor y otros síntomas característicos de esta patología intestinal como la hinchazón abdominal, la diarrea y el estreñimiento.

Tener niveles bajos de vitamina D se asocia con un mayor riesgo de diabetes, enfermedad inflamatoria intestinal, o cáncer colorrectal

Tener niveles bajos de vitamina D se asocia con un mayor riesgo de desarrollar diversas enfermedades, desde diabetes hasta cáncer de próstata, y también con la enfermedad inflamatoria intestinal y el cáncer colorrectal, por lo que los investigadores analizaron los resultados de todos los estudios publicados hasta ese momento en los que se hubiera investigado sobre el síndrome del intestino irritable y la vitamina D, y comprobaron que entre los afectados por este trastorno hay una elevada prevalencia de deficiencia de este micronutriente.

Suplementos de vitamina D para pacientes con SII

Bernard Corfe, el principal autor de la investigación ha explicado que aunque es necesario realizar nuevos estudios al respecto, sus hallazgos sugieren que se deberían analizar los niveles de vitamina D en todas las personas con SII, porque un elevado porcentaje de ellas se podría beneficiar de tomar suplementos de esta vitamina que, además, resulta imprescindible para mantener una buena salud ósea y mental, y una adecuada función inmune.