Todas las mujeres, independientemente de su orientación sexual o situación sentimental, podrán acceder a los tratamientos de reproducción asistida ofrecidos en los centros del Sistema Nacional de Salud (SNS), según anunció el pasado viernes en rueda de prensa Isabel Celáa, ministra de Educación y Formación Profesional y portavoz del Gobierno.
De esta forma, tanto las mujeres que no tengan pareja, como las lesbianas, podrán recuperar el derecho de recibir este tipo de prestaciones sanitarias con financiación pública, una posibilidad que se les negó en noviembre de 2014, cuando el Gobierno restringió el acceso a la reproducción asistida en los centros públicos, excluyendo a las lesbianas y a aquellas mujeres que desearan ser madres solteras –aunque algunas comunidades autónomas se negaron a cumplir dicho veto–.
En noviembre de 2014 el Gobierno restringió el acceso a la reproducción asistida en los centros públicos, excluyendo a lesbianas y a mujeres sin pareja
La cartera de servicios del SNS se actualizará mediante una Orden Ministerial, cuya tramitación se iniciará inmediatamente. El próximo día 13 de julio se reunirán los responsables de las comunidades autónomas en materia de prestaciones, aseguramiento y financiación del consejo Interterritorial del SNS, y también se celebrarán diversas reuniones con el movimiento asociativo, así como sociedades científicas y profesionales.
Una Ley que no discrimina frente al derecho a ser madre
Tras la tramitación del procedimiento normativo, se prevé que esta medida entre en vigor durante el primer trimestre de 2019, e iguale el derecho de todas las mujeres a someterse a estos tratamientos, ya que según la Ley estatal (14/2006) sobre técnicas de reproducción humana asistida, el único requisito necesario para ello es ser mayor de 18 años y dar el correspondiente consentimiento.
Se estima que en nuestro país, cerca del 20% de los tratamientos de reproducción asistida se realizan en la sanidad pública.
