Centros de día
Los centros de día son una gran oportunidad de socialización, entretenimiento y cuidado profesional para las personas mayores. Te contamos cómo funcionan y qué tipo de actividades ofrecen y cómo elegir el tuyo.

Diez consejos para elegir el centro de día para mayores adecuado

Dos hombres mayores charlan con una empleada en un centro de día
Antes de decidirte por un centro de día, visita sus instalaciones y pregunta por las actividades, el horario, las normas, el régimen de comidas…

Por: L. García

Periodista especializada en tercera edad, belleza y ejercicio

Actualizado: 29 de julio de 2022

Cada día hay más oferta de centros de día, lo que permite a los mayores encontrar uno adecuado a sus gustos e intereses con más facilidad. Te ofrecemos diez consejos para ayudarte a encontrar el mejor en tu caso o el de tu familiar:

  1. Visitar varios centros de día es algo imprescindible antes de elegir cuál es el mejor para cada persona. Y es que así se puede comprobar, por ejemplo, de qué instalaciones dispone, el estado de conservación de las mismas y del mobiliario, o cómo es el personal.
  2. Es importante acudir cuando hay actividades para conocer el día a día y observar cómo se desarrollan esos servicios. Además de una charla con el director o la persona encargada de recibir a los posibles miembros, hay que exigir poder presenciar alguna de las actividades antes de tomar una decisión.
  3. Se debe analizar si el horario se adapta a las necesidades del futuro usuario. Esto significa tener claro si se puede estar toda la jornada, sólo algunas horas, o si es posible salir y entrar cuando se desee.
  4. Para evitar incidencias o problemas en el centro, solicita el reglamento de régimen interno para saber qué está permitido y qué no. Asimismo, es adecuado disponer por escrito de cualquier aclaración o duda. La comunicación entre el usuario o la familia y el centro ha de ser fluida.
  5. Cuando lo visites, asegúrate de recorrer todos los lugares en los que se van a desarrollar actividades en el futuro. Así podrás comprobar si la higiene es aopropiada y si aporta una sensación de bienestar por recibir luz natural, disponer de medidas de seguridad y protección en perfecto estado, espacios amplios, salas específicas para el trabajo terapéutico, diferentes áreas de forma que no se mezclen las actividades…
  6. Por supuesto, es fundamental que cumpla la normativa vigente respecto a accesibilidad y seguridad, por lo que ha de estar provisto de rampas, barandillas, ascensor, salidas de emergencia, extintores…, así como un plan de desalojo en caso, por ejemplo, de incendio. En este sentido, lo mejor es acudir a los Servicios Sociales para informarse sobre las inspecciones realizadas a cada centro.
  7. Respecto al transporte adaptado es importante asegurarse de si existe la posibilidad de que recoja al usuario en su domicilio en caso de necesidad, o se limita a realizar una ruta con varias paradas a las que es preciso que éste acuda por sus propios medios.
  8. En los comedores debes informarte sobre qué comidas se cubren. “Este servicio varía en función de las horas que acude el usuario al centro, porque puede haber flexibilidad de horarios en función de las necesidades concretas del usuario o de su familia. Si asiste la jornada completa, disfruta de desayuno, comida, y también de merienda. Pero se da el caso de usuarios que a lo mejor sólo vienen dos o tres horas y, en función de eso, se planifica su alimentación también”, explica Roberto Rodríguez, director de comunicación, marketing y relaciones institucionales de Grupo Amma.
  9. ¿Qué sucede si eres diabético? ¿Si tienes alguna alergia o intolerancia alimentaria? ¿Y si eres celiaco? Infórmate, pregunta si hay algún nutricionista en el centro, si tienen menús especiales, y si se adaptan a tus necesidades médicas.
  10. Es posible encontrar dos centros que se ajusten a lo que estás buscando y tengas que decidir cuál es el más apto, pero hay algo en lo que rara vez coinciden: la lista de actividades en cartera. Analiza qué ofrece cada uno y cuál se adapta mejor a tus intereses o aficiones. Por ejemplo, si te gusta bailar, elige el que dé clases de baile. El centro de día es un gran agente socializador y es mejor disfrutar realizando actividades con las que una persona se sienta reconfortada. Todos están capacitados para atender las necesidades básicas, pero algunos, por ejemplo, hacen más hincapié en las actividades al aire libre, y esto puede ser especialmente agradable, interesante o divertido para ciertas personas.

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Creado: 15 de abril de 2015

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