Chile, el país con más depresión de Latinoamérica

El 17,2% de los chilenos ha experimentado síntomas de depresión en los últimos meses, y según la OPS el país presenta la tasa más alta de este trastorno mental en Latinoamérica y una de las más altas del mundo.
Hombre con depresión
En Chile, enfermedades como la depresión y la esquizofrenia se incluyen en el Plan Auge, que garantiza su tratamiento por ley.

El 17,2% de los chilenos ha sufrido síntomas de depresión en los últimos meses, siendo las mujeres y las personas con menos recursos económicos los más afectados por este trastorno mental. La tasa de depresión en Chile es la más alta de Latinoamérica, según la Organizacion Panamericana de la Salud (OPS), y una de las más elevadas del mundo, por lo que constituye un auténtico problema de salud publica en el país.

PUBLICIDAD

De hecho, en un estudio elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1993, en el que se analizaron datos de pacientes de Atención Primaria de 14 ciudades de diversos continentes, se comprobó que Santiago de Chile presentaba la mayor prevalencia de depresión, con un 29,5%. Esta organización ha solicitado una Ley de Salud Mental en el país para que este tipo de patologías puedan prevenirse y tratarse, y se establezcan las condiciones necesarias para que los afectados puedan reinsertarse en la sociedad.

Solo alrededor del 2% del presupuesto del Ministerio de Salud se destina a los trastornos mentales, cuando debería alcanzar como mínimo un 5%

Aunque Chile es de los pocos países de bajos y medianos ingresos en el que la atención a la salud mental está universalizada en Atención Primaria, y enfermedades como la depresión y la esquizofrenia se incluyen en el Plan Auge, que garantiza el tratamiento por ley, solo alrededor del 2% del presupuesto del Ministerio de Salud se destina a los trastornos mentales, cuando debería alcanzar como mínimo un 5%.

PUBLICIDAD

Los resultados de la Encuesta Nacional de Salud de 2010 indican que las patologías mentales afectan especialmente a las mujeres y a las personas con un perfil económico y socio-cultural más bajo. Como ha explicado Graciela Rojas, investigadora de la Universidad de Chile, las desigualdades sociales que se dan en Chile podrían contribuir a estos índices tan elevados de problemas mentales, porque la gente tiene grandes expectativas que no alcanza, y esto genera mucho estrés y frustración.

PUBLICIDAD

Actualizado: 17 de octubre de 2017

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD