8 de julio de 2013

Un exceso de fructosa en el embarazo podría afectar al bebé

Una investigación con ratas de laboratorio muestra que consumir un exceso de fructosa durante la gestación podría alterar la respuesta biológica de la descendencia frente al ayuno o la obesidad.

Un grupo de investigadores españoles ha realizado un estudio con ratas de laboratorio que muestra que consumir fructosa en exceso durante la gestación, altera la respuesta de la embarazada a la leptina, una hormona que interviene en el control de la sensación de saciedad y que regula la ingesta y el gasto de energía, por lo que la resistencia a la leptina se asocia al sobrepeso y la obesidad.

De acuerdo con las conclusiones del estudio, que se ha publicado en ‘Journal of Nutritional Biochemistry’, ingerir una elevada cantidad de fructosa -un tipo de edulcorante común en la mayoría de los refrescos artificiales- durante el embarazo, podría condicionar la respuesta biológica de las crías ante el ayuno o la obesidad, por lo que de confirmarse esta asociación en los seres humanos, tendría una gran relevancia, ya que cada vez es más frecuente el consumo de refrescos ricos en fructosa.

Consumir una elevada cantidad de fructosa durane el embarazo, podría alterar la respuesta del bebé a la leptina, una hormona que regula la ingesta y el gasto de energía

Para llevar a cabo la investigación, los científicos dividieron a las ratas embarazadas en tres grupos; al primero le ofrecieron agua corriente, al segundo agua enriquecida con fructosa, y en el agua del tercer grupo añadieron la misma cantidad de azúcar en forma de glucosa.

Observaron así que los tres grupos de animales presentaban distintos parámetros bioquímicos en la sangre, en los tejidos y en la expresión de diversos genes, y lo mismo ocurrió en el caso de las crías. Sólo el grupo que había ingerido fructosa a través del agua presentaba alteraciones en la respuesta a la leptina.

Actualizado: 1 de agosto de 2017