7 de agosto de 2017
Logran regenerar células de la retina en ratones adultos
Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en Seattle (Estados Unidos) han realizado un estudio –publicado en Nature– en el que han logrado regenerar células de la retina de ratones adultos, un paso más para conseguir desarrollar nuevos tratamientos para curar patologías oculares que provocan la pérdida de la visión como el glaucoma, o para reparar los tejidos de la retina dañados por traumatismos y otras enfermedades de los ojos.
Las células de la retina humana no tienen la capacidad de regenerarse una vez dañadas. Sin embargo, en la naturaleza hay animales, como es el caso del pez cebra, que sí pueden regenerar tejidos deteriorados, incluyendo los de la retina, gracias a que disponen de unas células denominadas glía Müller, que tienen un gen –AscI1– que se activa cuando se producen daños y permite la recuperación de los tejidos y la restauración de la vista.
El pez cebra, un animal que sí puede regenerar tejidos deteriorados como los de la retina, ha servido de modelo a los investigadores
El grupo de científicos, dirigidos por Tom Reh, diseñaron un modelo de ratón con una versión del gen AscI1 en su glía Müller, y después activaron el gen administrándoles una inyección del fármaco tamoxifeno. Al activar AscI1 y emplear una droga que bloquea la regulación epigenética, consiguieron que la glía Müller se diferenciara en los ratones adultos en interneuronas funcionales, y que dichas interneuronas se integraran en la retina y estableciesen conexiones con otras células de la misma, reaccionando con normalidad a las señales de luz que detecta la retina.
El objetivo de estos especialistas es determinar la existencia de otros factores que puedan activarse y permitir que la glía Müller se regenere en todos los distintos tipos de células de la retina, ya que si esto fuese así se podrían desarrollar nuevos tratamientos que permitieran reparar las lesiones en la retina, hasta ahora irreversibles, y evitar algunas de las causas más frecuentes de pérdida de visión.