27 de enero de 2022

Identifican una proteína clave en el desarrollo del cáncer de pulmón

Descubren que la proteína Plakofilina 1 (PKP1) desempeña un papel clave en el desarrollo y la progresión del cáncer de pulmón, lo que puede ayudar a diseñar nuevos tratamientos más eficaces para combatir la enfermedad.

El cáncer de pulmón provocó la muerte de alrededor de 22.000 personas en España en 2020, y su mortalidad aumentó un 4,4% en las mujeres respecto a 2019, por lo que el Grupo Español de Cáncer de Pulmón ha advertido del avance de esta enfermedad, que es la cuarta causa de muerte en el mundo y la primera por cáncer en España, y ha pedido que se destinen más recursos para su prevención e investigación.

Aunque el consumo de tabaco es la principal causa de esta neoplasia, encontrar otros factores de riesgo resultaría de gran ayuda para evitar su aparición y mejorar su tratamiento. Ahora, el grupo de investigación de Genética y Oncología Molecular del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (ibs.GRANADA) ha identificado una proteína –denominada Plakofilina 1 (PKP1)– responsable de la aparición y progresión del cáncer de pulmón, un descubrimiento que puede contribuir a crear tratamiento más eficaces para combatirlo.

Una ayuda para diseñar nuevas terapias contra el cáncer de pulmón

Diversos estudios llevados a cabo en los últimos 10 años han demostrado que ciertas proteínas que intervienen en la unión celular y se encuentran en las estructuras y la membrana de la célula, pueden estar también en el citoplasma y en el núcleo. La localización de estas proteínas en distintos sitios hace que desempeñen un importante papel en procesos celulares destacables, como la aparición del cáncer.

Esta proteína se puede convertir en un valioso biomarcador para diagnosticar la enfermedad y en una potencial diana terapéutica en el carcinoma de células escamosas de pulmón

Los investigadores han estudiado una proteína que se halla en el núcleo y el citoplasma celular que actúa como reguladora de la expresión génica que interviene con frecuencia en la regulación y señalización de distintos procesos y favorece la progresión de varios cánceres.

Esta identificación plantea la posibilidad de inhibir las interacciones de la proteína con medicamentos y progresar en el desarrollo de nuevos tratamientos contra el cáncer. Además, esta proteína se puede convertir en un valioso biomarcador para diagnosticar la enfermedad y en una potencial diana terapéutica en el carcinoma de células escamosas de pulmón.

Actualizado: 5 de mayo de 2023