18 de febrero de 2022

Los cerebros de los niños y niñas con autismo presentan diferencias

Identifican diferencias en zonas del cerebro en niñas y niños con autismo, que también influyen en que sus síntomas varíen y podrían ayudar a mejorar el diagnóstico y tratamiento de las niñas con este tipo de trastornos.

Los niños con un trastorno del espectro autista (TEA) tienen dificultades para comunicarse y relacionarse con los demás, sus intereses están restringidos, y muestran comportamientos repetitivos, pero este trastorno del desarrollo afecta de manera diferente y con un grado distinto de intensidad a cada individuo. En 1943 el Dr. Leo Kanner publicó la descripción original del autismo, que estaba sesgada hacia los pacientes masculinos, a lo que se añade que cuatro veces más niños que niñas son diagnosticados de autismo, por lo que la mayoría de los estudios se han centrado en los varones.

Una nueva investigación realizada por científicos de la Universidad de Stanford (California, EE.UU.) ha encontrado ahora diferencias en el cerebro de las niñas con autismo en comparación con el de los niños con este trastorno y esto sugiere que debería tenerse en cuenta el sexo a la hora de hacer un diagnóstico. Las diferencias, que se han podido identificar gracias al análisis de cientos de escáneres cerebrales con técnicas de inteligencia artificial, eran exclusivas del autismo, ya que no estaban presentes en los menores con un desarrollo típico.

Los resultados del estudio, que se han publicado en The British Journal of Psychiatry, ayudan a explicar por qué los síntomas del autismo son diferentes dependiendo del sexo, y pueden contribuir a mejorar los diagnósticos de TEA en las niñas. “Cuando una condición se describe de manera sesgada, los métodos de diagnóstico están sesgados”, ha afirmado el principal autor del estudio, el Dr. Kaustubh Supekar, profesor asistente clínico de psiquiatría y ciencias del comportamiento. “Este estudio sugiere que debemos pensar de manera diferente”.

Mejorar el diagnóstico y el tratamiento del autismo en las niñas

En la investigación se analizaron los escáneres cerebrales de resonancia magnética funcional de 773 menores con autismo: 637 niños y 136 niñas. Los autores del estudio se basaron en datos recopilados en Stanford y en bases de datos públicas que contenían escáneres cerebrales de sitios de investigación de todo el planeta y desarrollaron un algoritmo capaz de distinguir entre niños y niñas con un 86% de precisión. Cuando probaron el algoritmo en los 95 escáneres cerebrales restantes de niños con autismo, su precisión para diferenciar a los niños de las niñas se mantuvo. También se probó en 976 escáneres cerebrales de niños y niñas sin TEA y el algoritmo no pudo distinguir entre ellos, lo que confirma que las diferencias sexuales que encontraron estos científicos eran exclusivas del autismo.

En el caso de los menores con autismo se observó que las niñas presentaban diferentes patrones de conectividad que los niños en varios centros del cerebro, incluidos los sistemas de atención motora, del lenguaje y visuoespacial. Las diferencias en un grupo de áreas motoras, incluida la corteza motora primaria, el área motora suplementaria, la corteza occipital parietal y lateral y las circunvoluciones temporales media y superior, fueron las mayores entre sexos.

Las niñas presentaban diferentes patrones de conectividad que los niños en varios centros del cerebro, incluidos los sistemas de atención motora, del lenguaje y visuoespacial

Entre las niñas con autismo, las diferencias en los centros motores se asociaron a la gravedad de sus síntomas motores, lo que significa que las niñas cuyos patrones cerebrales eran más similares a los de los niños con autismo tendían a tener los síntomas motores más pronunciados. También se identificaron áreas del lenguaje que diferían entre los niños y las niñas con autismo, y los investigadores indicaron que en estudios anteriores se habían encontrado mayores problemas de lenguaje en los niños.

Los hallazgos, según los autores del estudio, deberían utilizarse para mejorar el diagnóstico y el tratamiento de las niñas con TEA. “Es posible que necesitemos pruebas diferentes para las mujeres en comparación con los hombres. Los algoritmos de inteligencia artificial que desarrollamos pueden ayudar a mejorar el diagnóstico de autismo en las niñas”, ha declarado Kaustubh Supekar, profesor asistente clínico de psiquiatría y ciencias del comportamiento, que concluye que las intervenciones para las niñas podrían comenzar antes.

Actualizado: 5 de mayo de 2023