Al igual que ocurre con el resto de anticonceptivos hormonales –píldoras, parches…– existe mucha información, no siempre exacta y comprobada científicamente, sobre los posibles efectos secundarios del anillo vaginal, que, como cualquier medicamento, también puede provocar algunos efectos no deseados.
Estos son algunos de los inconvenientes más comunes ligados a su uso según indica su prospecto:
- Dolor abdominal.
- Malestar (náuseas).
- Infección de la vagina por levaduras (parecido al muguet).
- Molestias vaginales debidas al anillo, picor genital, aumento del flujo vaginal.
- Dolor de cabeza o migraña, humor depresivo, menos deseo sexual.
- Dolor en las mamas, menstruación dolorosa.
- Acné.
- Aumento de peso.
Por último, conviene saber que, y al igual que con la píldora, usar el aro aumenta el riesgo de sufrir una trombosis (coágulo de una vena) en comparación con una mujer que no tome ningún anticonceptivo hormonal combinado. Una vez más, que tu médico te informe sobre todos los posibles inconvenientes que pueden derivar de su uso.