Patologías benignas de mama
El cáncer es la patología de las mamas más temida por las mujeres. Sin embargo, el 90% de las consultas relacionadas con la mama se deben a patologías que resultan ser benignas. Aprende a identificarlas.

Mastopatía fibroquística de la mama

David Saceda

Por: David Saceda Corralo

Médico Interno Residente, especialista en Dermatología Medicoquirúrgica y Veneorología

Dr. José Antonio Nuevo González

Revisado: Dr. José Antonio Nuevo González

Especialista en Medicina Interna. Servicio de Urgencias del Hospital Gregorio Marañón de Madrid

Actualizado: 21 de septiembre de 2022

La mastopatía fibroquística de la mama también se denomina adenosis, displasia mamaria o condición fibroquística. Es un conjunto de alteraciones naturales del contenido de las mamas; la causa son los ciclos hormonales que existen a lo largo de la vida de la mujer. No se considera una enfermedad, solo son cambios de la mama que no predisponen al cáncer.

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Se pueden diferenciar varios períodos dentro de la mastopatía fibroquística, conoce cuáles y sus características:

Período deficitario u hormonal

Se produce entre los 15 y los 30 años de edad y siempre en las dos mamas, que se someten a alteraciones hormonales, principalmente aumento de estrógenos o disminución de la progesterona. Lo más característico es el dolor mamario o mastodinia, sobre todo en el período menstrual, donde las mamas duelen y parecen estar llenas. Pueden aparecer nódulos o bultos mamarios fisiológicos (por ello no conviene explorar las mamas durante la menstruación).

Período proliferativo

Se da entre los 35 y 40-45 años (al principio de la menopausia); la alteración hormonal es la misma pero comienzan a aparecer induraciones no dolorosas. Parecen placas duras y fibrosas ("placas de guisantes o de perdigones") que están en ambas mamas y no suponen un riesgo para padecer cáncer.

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Período involutivo

La mujer no está en edad fértil, no hay lesiones nuevas y las anteriores evolucionan. Las induraciones forman quistes únicos y, en general, las lesiones ya no tienen por qué ser bilaterales.

Hay factores externos que pueden potenciar todos estos cambios descritos, como la ingesta de bebidas estimulantes (cafeína, teína) y las grasas saturadas. Además, se sospecha cierta base genética que predispone a las mamas a tener esta condición fibroquística más o menos acentuada. Tampoco existe un tratamiento para ello; en principio se tomarán analgésicos y antiinflamatorios si hay dolor. También se puede administrar tratamiento hormonal en los casos en que las alteraciones hormonales sean importantes.

Esta mastopatía fibroquística no tiene tratamiento quirúrgico, solo cuando a la exploración o en mamografías aparecen imágenes sospechosas se requiere biopsia. Si la mastopatía fibroquística es profusa y la paciente tiene antecedentes de carcinoma de mama con alto grado de fobia, se puede valorar la extirpación de la mama y la colocación de prótesis.

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Creado: 6 de diciembre de 2010

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