Los adolescentes que hacen ejercicio tienen mejores notas

Practicar ejercicio aeróbico moderado a diario tiene efectos beneficiosos sobre el cerebro de los adolescentes, y afecta positivamente a su rendimiento académico, según un reciente análisis de varios estudios sobre el tema.
Los adolescentes que hacen ejercicio tienen mejores notas
La actividad física aeróbica en los adolescentes favorece un correcto desarrollo personal y académico.

Practicar ejercicio físico a diario repercute positivamente sobre el rendimiento académico de los adolescentes, según ha revelado una investigación de la Universidad Internacional de Valencia que, tras analizar diversos estudios sobre el tema, ha concluido que los alumnos que realizan actividad física regularmente obtienen mejores notas que los que no lo hacen, y tienen también una mayor capacidad de atención, memoria y aprendizaje.

Realizar ejercicio aeróbico moderado tres días a la semana durante un año ayuda a que se produzca un incremento de hasta un 2% en el volumen del hipocampo

Los investigadores han comprobado que realizar ejercicio aeróbico moderado tres días a la semana durante un año ayuda a que se produzca un incremento de hasta un 2% en el volumen del hipocampo, junto a un aumento de la memoria espacial, el flujo sanguíneo, y la aportación de nutrientes y de los niveles de proteína y del factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF).

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Como ha explicado Francesc Llorens, autor del estudio y profesor del Grado de Educación Infantil y Primaria y del Máster en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, FP y Enseñanza de Idiomas de la Universidad Internacional de Valencia, el aumento del BDNF tiene como consecuencia que ‘las conexiones y la plasticidad neural sean mejores’, y esto tiene un efecto positivo sobre la memoria y el aprendizaje, que se refleja en el rendimiento académico.

Entre los beneficios que aporta la actividad física aeróbica moderada a los adolescentes, destacan las mejoras en las funciones ejecutivas básicas como la memoria, la flexibilidad cognitiva o la capacidad de inhibición, que son fundamentales para un correcto desarrollo personal y académico. Por ello, Llorens considera imprescindible que se incluya la práctica de actividad física en los colegios y opina que aunque lo ideal sería que la educación física se impartiera durante 45-60 minutos diarios, lo mínimo que se debería establecer en todas las escuelas serían cuatro sesiones cada semana de 45 minutos de duración (el doble de lo que hay ahora).

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Actualizado: 25 de abril de 2017

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