Qué es la colitis ulcerosa

¿Qué es la colitis ulcerosa?

La colitis ulcerosa es un tipo de enfermedad inflamatoria intestinal (EII) crónica de causa autoinmune que afecta principalmente a la capa superficial del colon1 y al recto, provocando una inflamación persistente de la mucosa intestinal y la aparición de úlceras. El sistema inmunológico ataca por error progresivamente tejidos del intestino grueso desde su porción más cercana al ano, el recto, hasta su inicio, el ciego, desencadenando síntomas como diarrea persistente, dolor abdominal, urgencia para defecar, y, en muchos casos, retortijones, fiebre y la presencia de sangre en las heces2. 

El resto del tubo digestivo no está afectado en la colitis ulcerosa, al contrario que en la enfermedad de Crohn. Aunque la colitis ulcerosa afecta principalmente al intestino grueso, la enfermedad puede comprometer a muchas otras partes del cuerpo, haciendo así más difícil su control.

Se pueden tratar sus síntomas, pero no existe un tratamiento definitivo que cure la colitis ulcerosa

Aunque su curso puede variar entre fases de brotes y remisión, la colitis ulcerosa tiene un impacto significativo en la calidad de vida de quienes la padecen. Así, los pacientes que sufren colitis ulcerosa padecen brotes cada cierto tiempo y entre uno y otro se encuentran bien la mayor parte del tiempo. No es posible saber cuándo sucederá un nuevo brote de la enfermedad, y cuando aparecen se deben tratar los síntomas para aliviarlos, pero no existe un tratamiento definitivo que cure la colitis ulcerosa.

En general, se estima que alrededor del 50-60% de los pacientes experimentan brotes leves a moderados. Un 20-30% pueden requerir hospitalización en algún momento por brotes graves. Entre un 10-15% pueden desarrollar una forma grave o fulminante, con riesgo de complicaciones como megacolon tóxico o perforación intestinal.

Prevalencia de la colitis ulcerosa

Junto a la enfermedad de Crohn se estima que suman alrededor de 2,5 millones de afectados en Europa. Como muchas enfermedades autoinmunes, son más frecuentes en Estados Unidos, Canadá y los países que se encuentran en el norte de Europa. En España hay unos 5-10 casos por cada 100.000 habitantes. En Latinoamérica la colitis ulcerosa es algo menos frecuente, aunque los últimos años han aumentado los casos entre la población, probablemente por los cambios de estilo de vida y alimentación, sobre todo en México y Brasil.

Suele iniciarse antes de los 40 años3. La mayoría de los casos aparecen en personas de raza blanca que viven en la ciudad, tanto en hombres como en mujeres. Se ha detectado un mayor número de casos entre individuos de raza judía, probablemente por una predisposición genética.

Pronóstico de los pacientes con colitis ulcerosa

El pronóstico de la colitis ulcerosa depende de varios factores, como la extensión y gravedad de la enfermedad, la respuesta al tratamiento, la edad de inicio, la presencia de complicaciones y la adherencia del paciente a las recomendaciones médicas. Aunque se trata de una patología crónica, la mayoría de los pacientes pueden llevar una vida relativamente normal si reciben el tratamiento adecuado y realizan un seguimiento médico regular.

El pronóstico de la colitis ulcerosa ha mejorado mucho estos últimos años gracias al descubrimiento de nuevos fármacos y se espera que en el futuro se pueda controlar todavía mejor. A pesar de ello, con el paso del tiempo una gran parte de los pacientes acaban necesitando una colectomía (extirpación quirúrgica del colon), sobre todo aquellos que no responden a los medicamentos o desarrollan complicaciones graves.

En pacientes con colitis ulcerosa extensa y de larga duración (más de 8-10 años), existe un mayor riesgo de cáncer colorrectal4, por lo que se recomienda vigilancia mediante colonoscopias periódicas a partir del octavo año tras el diagnóstico.

El embarazo mejorará la colitis ulcerosa en un tercio de las mujeres, otro tercio empeorará y el tercio restante no tendrá alteraciones de su enfermedad ni a peor ni a mejor.