No siempre es fácil diagnosticar un trastorno bipolar, porque los síntomas a menudo se confunden con otros problemas, o se asocian a otras enfermedades que pueden coexistir con el trastorno. Por ello, es conveniente consultar con el médico si sufre alteraciones del estado de ánimo intensas y frecuentes, y sobre todo si no siempre se pueden relacionar con acontecimientos vitales agradables o desagradables, o si la reacción afectiva en su caso es desproporcionada o se prolonga en el tiempo.
A veces los familiares y amigos pueden detectar un problema de este tipo antes que el propio afectado, por lo que si observan alguna irregularidad pueden animarle a ir al médico.
Una vez diagnosticado el trastorno bipolar es muy importante seguir las siguientes recomendaciones:
- No abandone el tratamiento farmacológico que le hayan prescrito, y que siempre deberá ser controlado por un médico.
- Establezca rutinas para realizar las actividades diarias, como las comidas y el descanso, y se asegure de dormir lo suficiente, como mínimo ocho horas y no más de diez.
- Aprenda a conocer la enfermedad y a distinguir los síntomas que indican las variaciones en su estado de ánimo.
- Hable con sus familiares y amigos más cercanos. Ellos también necesitan saber lo que le pasa para poder apoyarle mejor.
- Consulte a su médico sobre cualquier síntoma nuevo, o efectos secundarios relacionados con los fármacos que toma, como el litio, pero no suspenda el tratamiento por su cuenta porque puede ser peligroso y agravar los síntomas.
- Pruebe otros tratamientos, como la psicoterapia, que puede ayudarle a mejorar su calidad de vida y su relación con sus seres queridos.
- No consuma alcohol ni otras drogas.
- Evita consumir estimulantes como café, té o bebidas energéticas.
- No se automedique ni tome suplementos vitamínicos, o remedios naturales a base de hierbas, sin consultarlo antes con su médico.
- Realiza ejercicio físico de forma regular, te ayudará a controlar el estrés y la ansiedad, y a descansar mejor.
- Practica actividades relajantes (pintar, leer…) para huir del estrés y relativizar tus problemas.