Diagnóstico de los tumores cerebrales
Por: Esther Martín
Estudiante de medicina de la Universidad de Alcalá de Henares
Actualizado: 28 de junio de 2022
El diagnóstico de un tumor intracraneal se establece por el cuadro clínico y mediante exploraciones complementarias que confirman la presencia del tumor, su localización, e incluso, a veces, ofrecen información específica sobre sus características. La prueba más útil es la resonancia magnética (RM), que define, al igual que la tomografía axial computarizada (TAC), el propio tumor y lo diferencia del edema circulante.
Otras pruebas son la angiografía (examen diagnóstico por imagen que analiza los vasos sanguíneos), los potenciales evocados (prueba que consiste en registrar y procesar las respuestas del cerebro a diversos estímulos sensitivos), y los estudios de LCR.
El diagnóstico definitivo se establece con una biopsia (toma de una muestra de tejido para su estudio) del tumor, que se debe realizar (salvo indicación médica en contra), incluso aunque el tumor no sea susceptible de cirugía.
Diagnóstico diferencial
Los tumores intracraneales deben diferenciarse de otros procesos capaces de producir síntomas focales neurológicos. Por lo tanto, deben excluirse otros trastornos intracraneales expansivos no tumorales, como las hemorragias, los quistes, las malformaciones vasculares, etcétera.
Creado: 17 de enero de 2011