Examen pélvico

El examen pélvico o de los órganos genitales femeninos se realiza durante las revisiones ginecológicas rutinarias, el embarazo, si sospecha de una enfermedad de transmisión sexual (ETS), o se sufre dolor pélvico o flujo anormal.
Examen pélvico ginecológico

Por: Dr. Pablo Rivas

Especialista en medicina interna

Actualizado: 18 de octubre de 2023

Qué es un examen pélvico

El examen pélvico es la manera que tienen los médicos, habitualmente ginecólogos, de examinar los órganos genitales femeninos y otros órganos que se encuentran dentro de la pelvis. El propósito de este examen es evaluar la salud reproductiva, identificar posibles problemas y detectar de forma temprana enfermedades y condiciones ginecológicas como el cáncer cervical o infecciones de transmisión sexual (ITS).

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El examen pélvico incluye la exploración de los genitales de forma manual y la introducción de un espéculo para tomar una citología cervical, o muestras para el estudio de una enfermedad de transmisión sexual. En esta prueba se examinan:

  • La vulva, es decir los genitales externos de la mujer.
  • El útero, al que las pacientes también llaman la matriz y la vagina.
  • El cuello del útero, que es la zona más inferior del útero que se abre a la vagina.
  • Las trompas de Falopio, que son unos tubos por donde van los óvulos desde los ovarios al interior del útero.
  • Los ovarios, que son los órganos donde se producen los óvulos.
  • La vejiga de la orina.
  • El recto, que es la parte final del intestino grueso antes del ano.

El examen pélvico se lleva a cabo durante la revisión ginecológica que deben realizarse las mujeres de forma periódica. También se realiza cuando una mujer está embarazada, cuando se sospecha la presencia de una enfermedad de transmisión sexual, o cuando existen otros síntomas ginecológicos como dolor pélvico o flujo anormal.

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No obstante, la frecuencia recomendada de estos exámenes varía según la edad, la salud general y los factores de riesgo de cada persona. Por lo tanto, es esencial discutir con el médico o especialista cuándo debes realizarte un examen pélvico y cuáles son tus necesidades específicas.

Cuándo y para qué se realiza un examen pélvico

El examen pélvico se realiza con varios propósitos y en diferentes momentos de la vida de una mujer. Aquí hay algunas de las razones más comunes para realizar esta prueba ginecológica y cuándo se suele llevar a cabo:

  • Evaluación de la salud ginecológica: el examen pélvico se realiza para evaluar la salud de los órganos reproductores internos de una persona, como el útero, los ovarios y el cuello uterino. Esto ayuda a detectar posibles problemas de salud, como infecciones, tumores, quistes o crecimiento anormal de tejido (como pólipos) en el área genital.
  • Detección temprana de cáncer cervical: el examen Papanicolaou (Pap) se realiza durante el examen pélvico para detectar células anormales en el cuello uterino, lo que puede indicar cáncer cervical o condiciones precancerosas. Las pautas para las pruebas de detección de cáncer cervical pueden variar según la edad y la historia médica de la persona, pero generalmente comienzan alrededor de los 21 años.
  • Evaluación de la salud reproductiva: las personas pueden someterse a un examen pélvico como parte de una evaluación de la salud reproductiva, ya sea antes de concebir, durante el embarazo o para evaluar problemas de fertilidad.
  • Control de infecciones de transmisión sexual (ITS): se pueden realizar pruebas de ITS, como la toma de muestras para clamidia y gonorrea, durante un examen pélvico, especialmente si hay síntomas de infección o se ha tenido una exposición de riesgo.
  • Dolor pélvico o síntomas ginecológicos: si una persona experimenta dolor pélvico inexplicado, sangrado anormal, cambios en el ciclo menstrual u otros síntomas ginecológicos, un examen pélvico puede ayudar a diagnosticar la causa.
  • Seguimiento de afecciones ginecológicas conocidas: las personas con afecciones ginecológicas previas, como endometriosis o fibromas uterinos, pueden someterse a exámenes pélvicos de manera regular para monitorear y gestionar su condición.
Doctora poniéndose los guantes para hacer una exploración pélvica

Preparación para el examen pélvico

Estas son las cuestiones que debes tener en cuenta a la hora de someterte a un examen pélvico:

  • Duración: la prueba  se realiza en unos pocos minutos.
  • Ingreso: la prueba se hace de forma ambulatoria.
  • ¿Es necesario ir acompañada?: no hace falta ir acompañado aunque puede ser de ayuda si le hace sentirse más relajada.
  • Medicamentos: no es necesario tomar ningún medicamento previo.
  • Comida: no es necesario ir en ayunas.
  • Ropa: puede llevar la ropa que desee pero conviene que sea fácil de quitar de cintura para abajo.
  • Documentos: no es necesario ningún documento.
  • Contraindicaciones: no se realizan exámenes pélvicos en mujeres muy jóvenes o que no hayan tenido nunca relaciones sexuales.
  • Embarazo y lactancia: no contraindican la realización de la prueba, aunque conviene comentarle al médico la posibilidad de que esté embarazada.

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Otras consideraciones

  • Puede estar más cómoda si vacía la vejiga y el intestino antes de la prueba.
  • Si tiene alergia al látex debe advertírselo a su médico para que la explore con guantes hechos de otros materiales como vinilo.
Mujer sentada en una silla de reconocimiento pélvico

Cómo se hace el examen pélvico

El examen pélvico se realiza habitualmente en la consulta del ginecólogo. No dude en preguntar todas las dudas que tenga sobre la exploración. El contenido exacto de un examen pélvico puede variar según las necesidades individuales de cada paciente, pero por lo general, el profesional de la salud comienza recopilando información sobre los antecedentes médicos y reproductivos del paciente, incluyendo cualquier síntoma o preocupación que pueda tener. Posteriormente, el médico o el personal de enfermería le pedirá que se desvista de cintura para abajo en privado. Le facilitarán una bata o una sábana para cubrirse. Para realizar la exploración le pedirán que se tumbe boca arriba en una camilla especial con las piernas separadas y los pies colocados en unos estribos.

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Primero se realiza un examen externo, en el que el médico realiza una inspección visual de los órganos genitales externos para verificar si hay signos de infección, irritación o anomalías.

Después, se realiza un examen interno, en el que se introducirá un espéculo en la vagina, que es un instrumento con dos valvas que se separan y permiten abrir y examinar la cavidad vaginal y observar a fondo el cuello del útero. De esta manera, con una pequeña espátula o cepillo, se puede realizar un frotis o citología cervical (Papanicolaou o Pap) en el cuello uterino para detectar células anormales que podrían indicar cáncer cervical o condiciones precancerosas.

La exploración pélvica puede resultar algo molesta pero no es dolorosa. Sólo tiene que estar tranquila y lo más relajada posible. No es esperable ninguna complicación.

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Tras la citología le sacarán el espéculo y el médico hará una maniobra llamada exploración bimanual. Para ello, el médico se pondrá unos guantes y le introducirá dos dedos en la vagina previamente bien lubricados. Con la otra mano palpará y presionará por encima del pubis para explorar los órganos pélvicos, útero y ovarios, verificando su tamaño y forma, y buscando posibles masas o anomalías.

Si es necesario, se pueden tomar muestras de secreciones vaginales o cervicales para análisis adicionales, como pruebas de infecciones de transmisión sexual (ITS).

En ocasiones también se realiza un tacto rectal. Para ello, tras ponerse los guantes, se introduce un dedo previamente bien lubricado por el orificio anal en busca de tumores u otras anormalidades.

Mujer en la consulta médica recibiendo los resultados de un examen pélvico

Resultados del examen pélvico: qué indican

Los hallazgos que el médico observa en el examen pélvico normalmente le serán comentados inmediatamente tras la exploración. La toma de muestras para citología o para estudios de posibles infecciones se envía a distintos laboratorios para que sean analizadas. Los resultados de estas pruebas pueden tardar varias semanas. Algunos resultados, como los del Pap, pueden demorar varios días o semanas en procesarse en un laboratorio. Para las pruebas de ITS, los resultados generalmente se obtienen más rápido, en cuestión de días o incluso horas en algunos casos.

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El informe con todos los resultados incluirá datos sobre la técnica utilizada y los hallazgos encontrados. El tipo de hallazgo puede variar mucho:

  • En la mayoría de los casos, los resultados de un examen pélvico son normales, lo que significa que no se encuentran anormalidades significativas en los órganos reproductores internos. Esto es una buena noticia y sugiere que no hay indicios de infecciones, tumores ni otras afecciones ginecológicas graves.
  • Puede haber lesiones cutáneas en los genitales externos sugestivas de una infección de transmisión sexual como un herpes, una sífilis o verrugas genitales.
  • Puede encontrarse un flujo patológico característico de trastornos como la candidiasis, la tricomoniasis o la gonorrea.
  • En el cuello el útero puede haber lesiones sugestivas de un tumor. El útero puede estar agrandado y pueden palparse masas sugestivas de miomas.
  • Pueden palparse los ovarios aumentados de tamaño con lesiones sugestivas de quistes de ovario, etcétera.
  • Resultados de pruebas de detección de cáncer cervical: en el caso del examen Papanicolaou (Pap), los resultados pueden ser negativos, lo que significa que no se encontraron células anormales, o positivos, lo que indica la presencia de células anormales. Si el resultado del Pap es positivo, se pueden realizar más pruebas, como una colposcopia, para determinar la gravedad de las anomalías.

Conviene acudir a recoger el resultado del examen pélvico y no asumir que todo está normal porque no se le entregan los resultados en unas pocas semanas. El médico le dará los resultados y le indicará la necesidad de hacer otras exploraciones complementarias o algún tratamiento si fuera necesario.

Creado: 17 de septiembre de 2012

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