Dr. Eduardo López Bran

24 de junio de 2025
La alopecia androgénica o calvicie común afecta a millones de personas en todo el mundo, tanto hombres como mujeres, y, aunque existen tratamientos como el minoxidil, el finasteride o los trasplantes capilares, ninguna opción ha logrado frenar por completo la caída del cabello, ni estimular su recuperación de forma natural y duradera. Ahora, un emocionante nuevo estudio liderado por investigadores españoles ha abierto una vía esperanzadora porque ha demostrado que las células madre obtenidas del tejido graso –combinadas con una molécula llamada ATP– pueden estimular de forma significativa el crecimiento del cabello en modelos animales con alopecia inducida. Para conocer mejor los detalles de esta investigación, su posible aplicación en humanos y lo que puede suponer para las personas que sufren pérdida de cabello, entrevistamos al Dr. Eduardo López Bran, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital Clínico San Carlos y uno de los autores del estudio, que se ha publicado en Stem Cell Research & Therapy.
¿Por qué decidieron llevar a cabo este estudio para combatir la alopecia?
Esta investigación tiene su origen en mi objetivo de mejorar los resultados que obtenía con los trasplantes capilares. Para ello, comencé a utilizar diferentes medios para conservar las unidades foliculares una vez extraídas y antes de implantarlas, y observé que, cuando les añadía trifosfato de adenosina (ATP), lograba mejorar su supervivencia y, consecuentemente, los resultados de los trasplantes.
A raíz de esto, pensé que si añadíamos ATP a las células madre, que tienen la capacidad de diferenciarse en células foliculares, podríamos aumentar su supervivencia, con lo cual tendrían más tiempo para diferenciarse en células foliculares y para secretar factores de crecimiento, lo que podría conllevar que diesen lugar al recrecimiento del pelo en pacientes con alopecia androgénica.
Las células madre tienen la capacidad de diferenciarse en otros tipos de células, entre ellas, las células foliculares
Esto era necesario confirmarlo y, por eso, juntamente con la Sala Blanca del Hospital Clínico San Carlos, pusimos en marcha un estudio experimental en ratones hembra y macho a los que se indujo la alopecia y a los que posteriormente se les administró el producto.
¿Qué son exactamente las células madre derivadas de tejido adiposo, cómo se obtienen, y por qué las han elegido con el objetivo de tratar la alopecia androgénica?
Las células madre son células que tienen la capacidad de diferenciarse en otros tipos de células, entre ellas, las células foliculares. En los últimos años ha habido un gran desarrollo de terapias basadas en células madre para el tratamiento de diferentes enfermedades, entre ellas, la alopecia androgenética.
Un tipo de células madre fácil de obtener son las células madre mesenquimales que se obtienen de la grasa del tejido adiposo en los que, mediante una liposucción, se obtiene grasa de la que posteriormente se aíslan las células madre y, a continuación, se multiplican, obteniendo millones de células que posteriormente serán empleadas para el tratamiento.
¿Qué resultados obtuvieron al aplicar este tratamiento en ratones con alopecia inducida? ¿Se observó una mejora real en el crecimiento del pelo?
Una vez inducida la alopecia androgenética, en ratones macho y hembra, se les administró el producto en dos dosis separadas tres días, y se observó un recrecimiento del pelo en el 100 % de los machos y en el 90 % de las hembras.
Realizamos trasplantes no invasivos, logrando trasplantar un gran número de unidades foliculares, siempre que el paciente tenga suficiente área donante, con resultados definitivos y naturales
¿Hubo diferencias significativas en la respuesta al tratamiento entre ratones macho y hembras?
Existe una pequeña diferencia en el recrecimiento del pelo entre machos y hembras, cuyos motivos estamos valorando e investigando.
Una potencial terapia contra la calvicie en hombres y mujeres
¿Cómo podrían trasladarse los resultados que han obtenido en animales a un potencial tratamiento que se pudiera utilizar en los seres humanos?
Después de completar los estudios preclínicos in vivo (ratones) e in vitro (laboratorio), continuaremos con los ensayos clínicos en humanos para establecer la dosis eficaz y segura a aplicar para el tratamiento en hombres y mujeres.
¿Qué pasos serían necesarios antes de considerar aplicar esta terapia en pacientes? ¿Ya hay ensayos clínicos en marcha o previstos?
Nuestro objetivo es reproducir en humanos los resultados obtenidos en ratones. Para ello es necesario complementar los ensayos preclínicos de seguridad y, posteriormente, comenzar los ensayos en humanos que tenemos previsto iniciar a mediados del 2026.
Actualmente la alopecia androgénica se aborda con productos como minoxidil o finasteride, y también con trasplantes. ¿Podría combinarse esta nueva opción terapéutica con este tipo de tratamientos tradicionales para potenciar los resultados?
Los fármacos aprobados por las agencias reguladoras son minoxidil tópico y finasteride oral y tópico. En Tricología, en ocasiones se utilizan fármacos fuera de indicación que cuentan con respaldo científico, como el minoxidil oral y el dutasteride oral o en mesoterapia. También se utilizan el plasma rico en plaquetas (PRP) y el láser de baja intensidad.
En cuanto a los trasplantes de pelo, estos han evolucionado de manera muy satisfactoria y, en el momento actual, realizamos trasplantes no invasivos, logrando trasplantar un gran número de unidades foliculares, siempre que el paciente tenga suficiente área donante, con resultados definitivos y naturales. Estas intervenciones deben de realizarse en un entorno clínico seguro y por profesionales experimentados. Su demanda ha crecido de manera espectacular, gracias a las mejoras en la técnica y a la popularización de los resultados por el gran número de personajes conocidos que han difundido su nueva imagen.
La utilización de este tipo de terapia celular en otras aplicaciones clínicas en humanos hace presuponer que su uso en mujeres y hombres con alopecia será seguro
Aspiramos a que este tratamiento sea único, pero, si fuese necesario, valoraríamos combinarlo con otros.
¿Estamos ante un posible nuevo enfoque terapéutico contra la alopecia? ¿Podría beneficiar tanto a hombres como a mujeres con esta afección, o sería necesario personalizar los tratamientos en función del sexo u otras características del paciente?
Si los resultados obtenidos en ratones se reproducen en humanos, estaremos ante la primera terapia celular avanzada con células madre derivadas de la grasa con una elevada eficacia tanto para hombres, como mujeres, por lo que sí, supondría un nuevo enfoque terapéutico en alopecia androgenética.
La utilización de este tipo de terapia celular en otras aplicaciones clínicas en humanos hace presuponer que su uso en mujeres y hombres con alopecia será seguro, aunque será necesario esperar a que los ensayos en humanos así lo confirmen.
¿Cree que los hallazgos podrían contribuir a investigar otras aplicaciones médicas de las células madre en dermatología?
La Dermatología, como muchas otras especialidades médicas, se ha incorporado con fuerza a la búsqueda de terapias avanzadas que den respuesta a muchas enfermedades dermatológicas para las que no tenemos una solución eficaz en el momento actual. Confío en que los estudios de todos los equipos investigadores que estamos trabajando en terapias avanzadas (génicas, celulares o de ingeniería tisular) contribuirán a lograrlo.