Sheddad Kaid-Salah Ferrón

Aunque los microbios están en todas partes, y habitan la Tierra desde hace más de 3.700 millones de años, solo nos separan 150 años de un hecho que cambiaría la historia de la medicina: el descubrimiento de los microbios como causantes de enfermedades infecciosas. Sobre este mundo microscópico, Sheddad Kaid-Salah Ferrón, licenciado en Física y en Farmacia y divulgador científico, ha publicado Microbios (Andana Editorial), un álbum ilustrado informativo, para leer en casa y en la escuela, que acerca a grandes y pequeños a esos seres que son imprescindibles para la vida, pero también los causantes de patologías y pandemias. Con las llamativas ilustraciones de Eduard Altarriba y el lenguaje claro y ameno de los textos de Kaid-Salah, Microbios nos introduce en cuestiones como los tipos de microorganismos que existen, la estrecha relación que mantenemos los humanos con ellos, por qué es importante lavarse las manos, cómo funciona una vacuna, o conceptos como “resistencia bacteriana” o “inmunización”. Y lo hace como los mejores libros de divulgación científica: explicando en términos sencillos conceptos científicos complejos, lo que convierte a Microbios en un viaje fascinante hacia el conocimiento, pero también una vacuna contra la desinformación científica que nos sobrevuela en estos tiempos del COVID-19.

‘Microbios’ demuestra que se puede explicar en términos más o menos sencillos conceptos científicos más complejos. Aunque pensamos en un álbum ilustrado informativo para niños y jóvenes, ¿podría ser un recurso también para adultos?

Por supuesto. La ciencia es una fuente de conocimiento (aunque no la única) importantísima para los humanos y además es universal. Se basa en la observación de aspectos y fenómenos del mundo que nos rodea e intentar hacer teorías que los expliquen lo más acertadamente posible. La complejidad de las teorías científicas es la suma de muchas ideas simples. Al escribir libros de divulgación lo que se pretende es explicar estas ideas simples de una en una, para que se tenga una visión de conjunto que, y he aquí la magia, resulta ser menos compleja de lo que se creía en un principio.

El descubrimiento de los microbios como los causantes de las enfermedades infecciosas hace apenas unos 150 años cambió en profundidad la medicina y, por ende, la humanidad

En esto consiste aprender y para adquirir conocimiento no hay edad. ‘Microbios’ no es una excepción. Es, ante todo, un libro de divulgación científica.

Los microbios son importantes para la vida y pueden ser beneficiosos, pero también hay microbios que causan enfermedades en los seres humanos, en los animales y en las plantas. La pandemia ha demostrado que vivimos un poco ajenos al mundo microscópico que nos rodea: ¿por qué un álbum ilustrado hace que nos interesemos más por estos temas?

Por supuesto, y más si está ilustrado por Eduard Altarriba, uno de los mejores ilustradores de nuestro país. Los microbios nos han aportado muchas cosas positivas pero también han sido, y son, una fuente importante de enfermedades. Su descubrimiento como los causantes de las enfermedades infecciosas hace apenas unos 150 años cambió en profundidad la medicina y, por ende, la humanidad.

Pandemias: la importancia del conocimiento del mundo microscópico

¿Hasta qué punto dirías que es importante en un momento como el actual conocer el mundo microscópico que nos rodea?

Creo que la pandemia ha hecho que todos queramos saber un poco más sobre virus y bacterias y en esto ayudará mucho Microbios y más con la espectacular edición que ha hecho la editorial Andana (risas). El mundo de los microbios es un universo minúsculo lleno de vida e imprescindible para el planeta tal y como lo conocemos. Por ejemplo, es gracias a los microorganismos que podemos respirar el oxígeno atmosférico o digerir alimentos. También fabricamos medicinas, limpiamos las aguas sucias en las depuradoras y hasta podemos crear alimentos.

Es gracias a los microorganismos que podemos respirar el oxígeno atmosférico o digerir alimentos. También fabricamos medicinas, limpiamos las aguas sucias en las depuradoras y hasta podemos crear alimentos

¿Es la ciencia esencial para afrontar situaciones como la pandemia del COVID-19?

Por supuesto. La pandemia actual de COVID-19 ha hecho que cambiemos nuestros hábitos de vida y la forma de relacionarnos entre nosotros. Por suerte vivimos en una época en la que los avances tecnológicos y nuestro conocimiento del mundo microscópico nos han permitido llegar a tener vacunas para combatirlo en un tiempo récord. Más pronto que tarde empezaremos a recuperar la “normalidad”. Pero no hay que olvidar que esta no ha sido la primera pandemia de la humanidad ni será la última.

El conocimiento científico ayuda a tener pensamiento crítico para poder valorar y juzgar con criterio una noticia

Con la actual crisis hemos visto como la infodemia también ha supuesto un problema de salud para la población. ¿Dirías que tener conocimientos científicos, aunque sean básicos, nos puede servir de vacuna contra la desinformación y las noticias falsas?

Las fake news o noticias falsas son una de las grandes amenazas a las que se tendrá que enfrentar la humanidad en breve. Solo hay que ver cómo se están desarrollando los acontecimientos estos días en Estados Unidos. Informarse bien es fundamental. Como no podemos saber de todo es importante tener fuentes fidedignas a las que acudir en caso de duda. El conocimiento científico ayuda a tener pensamiento crítico para poder valorar y juzgar con criterio una noticia.

¿Qué estrategias considerarías interesantes para responder a este problema de sobreabundancia de información y los intentos de hacer llegar información falsa?

A mi entender, no consumir información como si fuera ‘fast food’ o mejor dicho ‘fast news’. Hay que tener mucho cuidado de dónde sacamos la información y, sobre todo, tenemos que darnos tiempo para digerirla y asimilarla. Tiene que prevalecer el espíritu crítico para poder tener una opinión adecuada sobre lo que nos estamos informando.

Hay que tener mucho cuidado de dónde sacamos la información y, sobre todo, tenemos que darnos tiempo para digerirla y asimilarla

¿Debemos estar preparadas para vivir más pandemias como la actual?

Sí. Es razonable pensar que, tarde o temprano, habrá más. Los virus y las bacterias moran la tierra desde hace más de 3.700 millones de años. Su estrategia es simple, mutan mucho y muy rápido para adaptarse al medio lo mejor posible, y esto lo llevan haciendo toda la vida. De vez en cuando una de estas mutaciones los convierten en patógenos peligrosos para los que nuestra especie aún no ha generado inmunidad. Un poco ha sido lo que ha pasado con la COVID-19.

¿Hay algo que se pueda hacer para evitarlo?

Se puede: invirtiendo muchos recursos y dinero en ciencia y en investigación básica para que, cuando vuelva a ocurrir, podamos reaccionar más rápidamente a la amenaza.

Las vacunas y los antibióticos salvan vidas

Dedicas un capítulo a las vacunas. “Gracias a la vacunación de la población, se han salvado muchísimas vidas”. Mencionabas antes como gracias al conocimiento de los microbios y a los avances tecnológicos se han conseguido vacunas contra el coronavirus en tiempo récord. Creo que sigue habiendo cierto desconocimiento entre la población de lo que es una vacuna y cómo llegamos a ellas… ¿Qué opinas de esto?

Es uno de los motivos por los que escribí el libro. He tenido conversaciones con gente cercana a mí reacia a las vacunas y los argumentos que dan en contra de las vacunas son pobres, no porque no sean personas inteligentes, si no por desconocimiento.

Millones de personas se vacunan cada año y las vacunas muestran una y otra vez ser eficaces y seguras

Las vacunas han sido un hito tecnológico que nos han permitido a todos vivir mejor. Han salvado millones de vidas y evitado sufrimiento a millones de personas. ¿Qué necesidad hay de pasar el sarampión, la polio o la hepatitis B? Enfermedades que pueden matar y han matado. El sarampión, por ejemplo, ha causado más de 200 millones de muertes a lo largo de la historia. Yo mismo pasé de pequeño las paperas. Y todo por nacer antes de que me pudieran vacunar de esta enfermedad. En cambio mis hijos han tenido la suerte de poderse vacunar de esta y otras enfermedades. Es uno de los lujos de nuestra sociedad.

Cuál dirías que es la vacuna más importante de la Historia, si es que se pudiera hablar de la “más” importante.

Hay muchas muy importantes. La del sarampión, la difteria, el tétanos, la polio…, pero quizás la vacuna de la viruela sea el paradigma de vacuna. La viruela, provocada por el Variola virus, ha sido la enfermedad infecciosa que más ha matado, unos 500 millones de personas a lo largo de la historia. Es una enfermedad extremadamente contagiosa y peligrosa, con un Ro de 5 y con una tasa de mortalidad del 30%. Para ponerlo en perspectiva, la COVID 19 tiene un Ro de 2,3 y una mortalidad entre el 0,5% y el 1 %. Gracias a las campañas de vacunación se logró erradicar en 1980.

¿Por qué son seguras las vacunas?

Yo diría que por razones obvias, pero vamos a concretar un poco más. Una razón es puramente estadística. Millones de personas se vacunan cada año y las vacunas muestran una y otra vez ser eficaces y seguras. Otra para mí muy importante es que la comunidad científica y sanitaria ponen mucho interés en que esto sea así, ya que prevalece el interés del bien común. Por si fuera poco, las agencias sanitarias reguladoras, en nuestro caso la agencia española del medicamento y la agencia europea del medicamento, no aprueban ninguna vacuna que no sea segura y que no haya pasado todas las fases de estudio.

Cada vez hay más bacterias resistentes por lo que nos cuesta cada vez más curar infecciones que antes eran muy fáciles de tratar

Los antibióticos son eficaces contra las bacterias y no contra los virus, pero un mal uso puede derivar en una resistencia bacteriana. ¿Será un problema en el futuro mayor que el de las pandemias por virus?

Es y será un problema de los gordos. Cada vez hay más bacterias resistentes por lo que nos cuesta cada vez más curar infecciones que antes eran muy fáciles de tratar. Para que nos hagamos una idea, la OMS considera la resistencia a los antibióticos “una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo”.

Si no le ponemos remedio, podríamos incluso tener en un futuro epidemias bacterianas muy preocupantes. Cabe recordar que la peste ha sido una de las enfermedades más mortíferas que ha sufrido la humanidad y la provoca la bacteria Yersinia pestis.

No es fácil distinguir entre una infección por virus o por bacterias. ¿Hay alguna fórmula que nos ayude a diferenciar entre estos dos microbios?

Las infecciones están causadas por microbios que son agentes invisibles, no los podemos ver a simple vista. Diagnosticar es muy difícil y para ello estudian muchos años los médicos. Para diagnosticar una infección siempre tenemos que acudir a nuestro médico de cabecera que será el profesional que decidirá qué pruebas diagnósticas se necesitan para identificar al patógeno y el que nos dará la pauta correcta para tratar y curar la infección.