Serpientes en casa
Si deseas tener una serpiente en casa, debes conocer su comportamiento y sus necesidades para ofrecerle una vida digna. Te explicamos lo que necesitas saber para convivir con estos reptiles y evitar sustos.

Consejos básicos para cuidar una serpiente en tu casa

Diana Oliver Ortiz

Por: Diana Oliver

Periodista especializada en vida sana, maternidad e infancia y mascotas

Actualizado: 22 de septiembre de 2022

Una vez analizado si realmente una serpiente es un animal de compañía adecuado para nosotros, debemos saber que si queremos que nuestra mascota disfrute de una vida digna, hay una serie de cuidados y condiciones que vamos a tener que ofrecerle. Los veterinarios expertos en animales exóticos Miguel Gallego y Jordi Aguiló nos dan algunas claves acerca de la alimentación y del habitáculo que necesitan estos reptiles, así como algunos consejos básicos para su correcto cuidado:

  • Es importante elegir la especie de serpiente en función a su carácter, tamaño de adulto, y facilidad para mantener en cautividad. También se deben adquirir unos conocimientos previos sobre el comportamiento y las necesidades de este tipo de animales, de forma que no solo evitemos sorpresas, sino que, además, podamos cubrir sus requerimientos.
  • No debemos en ningún caso elegir serpientes venenosas, aunque estén a la venta. Tampoco aquellas que superen los dos kilos de peso.
  • La alimentación consiste en presas, vivas o muertas (generalmente congeladas), que hay que adquirir en comercios especializados; no es posible alimentarlas con pienso ni ningún otro tipo de alimento diferente al indicado. Esto se debe a que son animales carnívoros estrictos, es decir, solo comen presas y necesitan proteína de origen animal.
  • Lo más adecuado es ofrecer las presas en función del tamaño de la serpiente. Dado que las especies más recomendables para una casa son las de pequeño tamaño, la opción ideal como presa suelen ser los roedores como ratas o ratones, de diferentes tamaños según la especie.
  • Las presas vivas son mejores desde el punto de vista nutricional, pero esto tiene unas implicaciones prácticas y éticas particulares: el hecho de poner un animal vivo para que sea devorado por la serpiente puede ser impactante para algunas personas (especialmente los niños). Para evitar esto podemos ofrecerle la presa recién muerta, pero para ello deberá ser sacrificada previamente. Otra opción es comprar presas ya muertas y congeladas; pero en ese caso tendremos que suplementar la alimentación con algunas vitaminas y componentes que pueden sufrir una alteración durante el proceso de congelación.
  • La serpiente siempre debe disponer de un pequeño recipiente de agua fresca en su terrario.
  • Es necesario un ambiente controlado para que viva de forma saludable; es decir, un terrario adecuado a su especie y tamaño, que cuente con una temperatura, una luz y una humedad determinadas y estables.
  • Hay especies más arborícolas que requerirán más ramas o troncos, otras son más bien desérticas y necesitarán una cueva para resguardarse. Todo depende de la especie, de ahí la importancia de conocer bien las características del animal que vamos a llevar a casa para proporcionarle el tipo de hábitat más adecuado.
  • Por último, los expertos señalan que el dueño de una serpiente debe también aprender a observar los signos de salud y enfermedad de su animal (como ejemplo, algunas serpientes pueden estar más de un mes sin comer sin que eso signifique que tengan que estar enfermas). Y, aunque no es necesario en todos los casos, recomiendan una revisión semestral, así como acudir al veterinario de referencia en caso de duda o sospecha de algún tipo de problema.

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Creado: 12 de abril de 2017

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