Vinculan el ejercicio a alta intensidad con un 40% menos riesgo de demencia

Comprueban que breves sesiones de ejercicio de alta intensidad pueden ser tan efectivas para promover un envejecimiento cerebral saludable y reducir el riesgo de deterioro cognitivo y demencia como sesiones más prolongadas de intensidad moderada.
pareja joven realizan burpees en su entrenamiento de fuerza

06/05/2025

El ejercicio físico es bueno para la salud y resulta clave para disfrutar de un envejecimiento activo, pero los investigadores continúan estudiando qué impacto tiene realmente en el cerebro a medida que envejecemos, y una nueva revisión científica sugiere que sus efectos podrían ser más importantes de lo que se creía hasta ahora y expone la necesidad de replantear las recomendaciones globales sobre actividad física, especialmente en relación con la prevención del deterioro cognitivo.

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Este nuevo trabajo desafía las actuales pautas de la Organización Mundial de la Salud1, que recomiendan realizar al menos 150 minutos semanales de ejercicio moderado y propone, en cambio, pequeñas dosis de ejercicio de alta intensidad porque, de acuerdo con sus conclusiones, el entrenamiento de resistencia y una buena condición física pueden reducir el riesgo de demencia y promover un envejecimiento cerebral saludable.

“La evidencia indica que breves episodios de ejercicio de alta intensidad podrían aportar beneficios iguales o incluso superiores a los del ejercicio moderado más prolongado, cuando se trata de un envejecimiento cerebral saludable”, ha explicado la Dra. Walker, investigadora del Queensland Brain Institute (Australia)2 y coautora del estudio. "Y nunca es demasiado tarde para empezar", añade Atefe R. Tari, primer autor del estudio. 

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Alcanzar hasta el 85% de la frecuencia cardíaca máxima durante el ejercicio parece favorecer la salud cerebral al mejorar la circulación sanguínea, reducir la inflamación y potenciar la plasticidad neuronal, que son factores clave para proteger el cerebro frente al deterioro cognitivo. Además, dado que muchas personas ni siquiera alcanzan los 150 minutos semanales recomendados, los autores del estudio creen que modificar las directrices para incluir sesiones cortas, pero intensas, podría motivar a más gente a adoptar hábitos activos.

Los mecanismos neuroprotectores del ejercicio

La revisión se ha publicada en The Lancet3 y en ella se recopilaron y analizaron los estudios más relevantes realizados tanto en humanos, como en animales, sobre el impacto del ejercicio en el envejecimiento saludable del cerebro. Los resultados mostraron cómo la actividad física afecta la inflamación, el flujo sanguíneo, la función inmune, la plasticidad cerebral y la liberación de moléculas protectoras en la sangre, que son procesos que se debilitan con la edad y contribuyen al desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.

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No obstante, los autores destacan que aún se necesitan más ensayos clínicos en humanos para definir con precisión qué tipo de ejercicio es más efectivo para mantener la salud cognitiva con los años. "Esperamos que esta revisión ayude a los científicos a diseñar ensayos clínicos humanos consistentes y controlados que investiguen los mecanismos neuroprotectores del ejercicio para ayudar a determinar cuál sería la prescripción óptima para un envejecimiento saludable", dijo la Dra. Walker.

“Con una población mundial que envejece rápidamente y siendo la edad el mayor factor de riesgo no modificable para la demencia, nos enfrentamos a un importante desafío de salud pública". “El ejercicio nos ofrece una estrategia de prevención accesible y de bajo costo en el esfuerzo global por combatir el deterioro cognitivo relacionado con la edad", concluye la experta

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El equipo del Queensland Brain Institute, junto con investigadores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU)4, está desarrollando un estudio longitudinal en ratones para seguir explorando los efectos del ejercicio a nivel cerebral. En concreto, la Dra. Walker dirige una línea de investigación centrada en las exerquinas, unas proteínas y metabolitos que se liberan en el organismo como respuesta al ejercicio y que podrían tener un efecto indirecto —y también directo— sobre el cerebro. Uno de los compuestos que están estudiando es el factor plaquetario 4 (PF4), que tras el ejercicio parece estimular la neurogénesis, la plasticidad sináptica y la memoria en ratones envejecidos.

“El ejercicio nos ofrece una estrategia de prevención accesible y de bajo costo en el esfuerzo global por combatir el deterioro cognitivo relacionado con la edad"

"Creemos que es hora de que las autoridades sanitarias brinden consejos más claros sobre la importancia del ejercicio para el cerebro. Nuestro análisis demuestra que incluso pequeñas dosis de actividad de alta intensidad —equivalente a caminar a paso ligero sin poder cantar— pueden reducir el riesgo de demencia hasta en un 40%, ha destacado el profesor Ulrik Wisløff, del Grupo de Investigación de Ejercicio Cardíaco (CERG) en NTNU en una nota publicada por el centro.

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Tari y Wisløff creen que este nuevo estudio hace que sea aún más importante difundir el mensaje. Las recomendaciones actuales enfatizan la actividad total, pero demostramos que incluso pequeñas cantidades de ejercicio de alta intensidad tienen un efecto en el cerebro. Esto debería comunicarse con más claridad; podría ser lo que motive a las personas a comenzar. Un poco es mejor que nada, y nunca es tarde para empezar, afirma Tari.

A medida que aumenta la esperanza de vida, el deterioro cognitivo y la demencia se están convirtiendo en un importante problema de salud pública. Dado que aún no existe cura, la prevención es crucial. "El ejercicio es económico, accesible y no tiene efectos secundarios. Debería considerarse una medida de primera línea para preservar la salud cerebral", concluye Tari.

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  • 1

    Directrices de la OMS sobre actividad física y hábitos sedentarios: de un vistazo [WHO guidelines on physical activity and sedentary behaviour: at a glance] ISBN 978-92-4-001481-7 (versión electrónica)

  • 2
    What the Evidence Tells Us about Exercise and Healthy Brain Ageing. 1745, https://qbi.uq.edu.au/article/2025/04/what-evidence-tells-us-about-exercise-and-healthy-brain-ageing.
  • 3
    Atefe R Tari, Tara L Walker, Aleksi M Huuha, Sigrid B Sando, y Ulrik Wisloff. «Neuroprotective Mechanisms of Exercise and the Importance of Fitness for Healthy Brain Ageing». The Lancet, vol. 405, n.º 10484, Elsevier BV, 2025, pp. 1093–1118+, doi:10.1016/s0140-6736(25)00184-9.
  • 4
    The University Network. «Exercise Promotes Brain Health and Slow Aging - TUN». TUN - The University Network, 2025, https://www.tun.com/home/exercise-promotes-brain-health-and-slow-aging/.

Actualizado: 6 de mayo de 2025

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