Cómo es una clase de Body Balance

Las clases de body balance no solo te ponen en forma, también sirven para relajarte.
Actualizado: 23 de enero de 2025
Casa sesión de Body Balance es diseñada por el equipo de expertos de Les Milles y luego se enseña en reciclajes trimestrales a los instructores de todo el mundo. De esta forma, el alumno siempre va a encontrarse con una clase efectiva, que no depende de la imaginación o capacidad del profesor. Además, los instructores de Body Balance necesitan una certificación previa para poder impartir este programa de ejercicio.
Piensa que además de mantener tu cuerpo en forma, las clases te servirán para relajarte, ya que los profesores colocan velas, incienso, esencias, luz tenue...
Cada clase consta de diez tracks dedicados a trabajar cada parte del cuerpo y cada uno de ellos está diseñado para fluir de forma armónica, creando una experiencia equilibrada que trabaja fuerza, flexibilidad y bienestar mental en igual medida. La música, cuidadosamente seleccionada para cada parte, actúa como una guía emocional que te conecta con cada movimiento:
Calentamientos de taichi: la clase comienza con un calentamiento suave que combina respiraciones y movimientos de esta disciplina oriental. Este track inicial está diseñado para calentar los músculos, activar la respiración consciente y centrar tu mente en el presente. Con movimientos fluidos y coordinados, como giros de brazos y balanceos del torso, irás preparando tu cuerpo para lo que viene.
Saludos al Sol: se trata de otro calentamiento articular y muscular más intenso siguiendo esta secuencia de estiramientos y posturas de yoga básicas, como el famoso "saludo al sol". Aquí empiezas a trabajar tu flexibilidad y fuerza mediante posturas que fluyen de una a otra, sincronizando cada movimiento con la respiración.
Trabajo de piernas: basado en el yoga, esta serie tonifica y estira las piernas con posturas estáticas y ejercicios dinámicos: pose del triángulo, del guerrero, pose intensa, árbol y otras variantes que combinan equilibrio y resistencia. Aquí notarás cómo los músculos de tus piernas empiezan a trabajar intensamente, al mismo tiempo que mejoras tu estabilidad.
Equilibrios: este track combina posiciones del yoga y la danza para trabajar el equilibrio, el control corporal y la corrección postural.
Aperturas de caderas e ingles: movimientos y posturas de yoga para estirar y trabajar las caderas y las ingles. Este track está enfocado en abrir las caderas, una zona donde solemos acumular mucha tensión, sobre todo si pasamos mucho tiempo sentados. Movimientos como la postura del lagarto o el medio loto ayudan a liberar esa rigidez.
Abdominales de Pilates y torsiones: en este track se trabaja tu core, esa zona crucial que incluye la musculatura abdominal, oblicuos y la parte baja de la espalda, combinando la respiración y los ejercicios propios de este método. Usando movimientos de pilates y yoga, como planchas y torsiones, trabajas la estabilidad y la fuerza desde el centro de tu cuerpo. Las torsiones son movimientos de gran extensión tomados del yoga y el tai chi para potenciar la movilidad de la columna y estimular los órganos internos.
Trabajo de espalda e isquiotibiales: esta serie refuerza y trabaja los músculos de la espalda, isquiotibiales y glúteos, acortados por la actividad diaria, a través del yoga, Pilates y método Feldenkrais.
Fortalecimiento de la parte superior del cuerpo: llega el momento de trabajar brazos, hombros y pecho. Con posturas como el perro boca abajo, el perro boca arriba y variantes de planchas, sentirás cómo tu tren superior gana fuerza y resistencia.
Relajación y estiramientos profundos: este track es una de las partes más restauradoras de la sesión. Se incluyen estiramientos largos y profundos, inspirados en el yoga restaurativo, para liberar tensiones en músculos que han trabajado intensamente durante la clase.
Relajación final, meditación y gratitud: con una música muy suave y a través de la respiración y la meditación, el instructor ayuda a los alumnos a relajar cuerpo y mente. Uno de los momentos más esperados de la clase, ya que este último track es el momento de máxima calma. En esta fase, te tumbas en el suelo, cierras los ojos y simplemente te dejas llevar por la música. Este momento está pensado para integrar los beneficios de toda la sesión y salir con una sensación de plenitud.

Para practicar body balance utiliza ropa cómoda que te permita moverte.
10 Consejos para practicar Body Balance
Si te has decidido a probar el Body Balance debes saber que es una disciplina que te permitirá trabajar cuerpo y mente en perfecta sintonía, pero como toda nueva experiencia, es normal sentir un poco de incertidumbre al principio. Para ganar en confianza y despejar tus dudas, aquí tienes una guía de consejos prácticos para sacar el máximo partido a tus primeras clases y disfrutar del proceso de iniciarte en el Body Balance:
Puedes practicar Body Balance en clubes deportivos adscritos al sistema BTS (Best Training System) de Les Milles International, en España o en el extranjero. Puedes informarte de tu centro más cercano en su web oficial.
Para hacer una clase de Body Balance se utiliza ropa cómoda y ligera, que te permita moverte y transpire. El Body Balance implica movimientos amplios y estiramientos, por lo que es fundamental que uses ropa que no restrinja tu movilidad como unas mallas o leggings y una camiseta ajustada pero cómoda. Para que las sensaciones y la comodidad sean mayores, hay que descalzarse. En invierno no te olvides de llevarte calcetines antideslizantes para mejorar la conexión con el suelo y sudadera para no enfriarte durante la relajación.
Aunque de forma suave, harás mucho ejercicio, así que no entres a clase sin una botella de agua. Y no te olvides de hidratarte antes y después para evitar calambres o tirones musculares.
Si eres principiante, comienza haciendo las opciones sencillas que te marque el profesor, no te precipites, tienes tres meses para mejorar tus condiciones físicas, perfeccionar tu técnica y conseguir hacer los ejercicios avanzados.
Aprende a escuchar a tu cuerpo: es normal sentir algunos músculos tensos al principio, sobre todo si no tienes experiencia previa en yoga o pilates. Pero presta atención a cómo responde tu cuerpo y no te fuerces a llegar más allá de tus límites. Con el tiempo, ganarás flexibilidad y fuerza de manera natural.
Enfócate en la respiración: uno de los pilares del Body Balance es la conexión entre el movimiento y la respiración. Si pierdes el ritmo, prioriza inhalar y exhalar de manera fluida antes de preocuparte por la postura. La respiración no solo te ayuda a relajarte, sino que también mejora tu rendimiento y concentración durante la sesión.
Body Balance es un sistema de acondicionamiento físico en sí mismo, así que podrías practicarlo cada día. No obstante, como suele practicarse como complemento a otras actividades físicas, lo ideal es hacer de dos a tres sesiones semanales.
Los diez tracks de la sesión se realizan de forma coreografiada con la música, para lo que se emplean siempre temas actuales o emblemáticos que te encantará escuchar mientras haces ejercicio.
Utiliza accesorios si es necesario: si sientes que ciertas posturas son complicadas no tengas miedo de usar elementos de apoyo, como bloques de yoga o toallas enrolladas. Los instructores suelen ofrecer opciones modificadas, así que no dudes en elegir la que mejor se adapte a ti.
Una de las grandes ventajas de Body Balance es que si cambias de gimnasio, ciudad o incluso país, puedes seguir practicándolo con la misma eficacia, sólo tienes que buscar un club adscrito al sistema BTS (¡está presente en todo el mundo!).
Creado: 8 de julio de 2011