Qué es el bosu

Actualizado: 5 de septiembre de 2022
También conocido como Bosu Balance Trainer o Bosu Conditioning, esta modalidad fue diseñada en el año 1999 por David Weck y en la actualidad es una de las técnicas de fitness más practicadas.
Su nombre, bosu, del inglés Both Side Up, se debe a que, a la hora de realizar los ejercicios, esta semiesfera de 65 centímetros de diámetro puede utilizarse por ambos lados. Es decir, por su parte cóncava, así como por la plana, la cual es antideslizante. Suelen estar realizados en látex y son capaces de aguantar el peso de personas de hasta 140 kg.
El éxito y la clave de este ejercicio radican en el equilibrio, ya que, al realizar el entrenamiento sobre una base inestable, conseguimos tonificar parte de nuestra musculatura, principalmente la de la zona abdominal. Por todo ello puede usarse tanto en entrenamientos cardiovasculares, Pilates, yoga e incluso para rehabilitación de lesiones.
Objetivos del Bosu
La práctica del Bosu tiene como finalidad tres objetivos básicos:
A la hora de realizar nuestro entrenamiento, y en función de nuestra capacidad física y de las mejoras que queramos conseguir, decidiremos cuál de los tres objetivos es el que vamos a trabajar durante la sesión.
¿Para quién está recomendado el bosu?
Respecto a quién puede o no puede realizar este tipo de actividad, cualquier persona con una buena condición física puede practicar Bosu siempre y cuando no haya lesiones previas o indicaciones médicas que lo impidan.
Los expertos recomiendan a quienes están interesados en iniciarse en el Bosu que, previamente, tengan una mínima formación en Pilates, ya que ambas disciplinas están bastante relacionadas.
En la actualidad, ya es posible encontrar en Internet numerosos tutoriales sobre cómo utilizar el Bosu e, incluso, puede adquirirse este aparato en comercios especializados en material deportivo. Ahora bien, si eres de los que no suele realizar actividades físicas de forma regular, lo más recomendable es que asistas a sesiones guiadas antes de comenzar a usarlo. Allí, los monitores y especialistas te indicarán el tipo de ejercicios que son más recomendables en función de tu condición física, y la intensidad a la que debes hacerlos para evitar así el riesgo de posibles lesiones.
Sin embargo, tal y como acabamos de mencionar, el fácil acceso al equipo (puedes comprar un buen bosu por un precio de entre 135 y 200 euros) y su reducido tamaño hacen de él un ejercicio idóneo para practicar en casa en nuestros ratos libres, siempre y cuando no dispongamos de tiempo o dinero para acudir a un centro deportivo especializado. La orientación de un monitor, la música y el contacto con tus compañeros de clase siempre es un plus de motivación y perfeccionamiento para sacarle el máximo partido a esta completa modalidad.
Creado: 15 de marzo de 2012