Dónde realizar ejercicios acuáticos: consejos para seniors
Actualizado: 22 de septiembre de 2022
Hoy en día existen instalaciones deportivas en todas las ciudades, e incluso en los pueblos, y en ellas no suele faltar una piscina, ya sea más grande o más pequeña. Sin embargo, disponer de este tipo de servicio no garantiza que los adultos mayores puedan ejercitarse en ellas, ya que para realizar ejercicio físico en el agua se recomienda que cumplan una serie de requisitos, como:
- Es conveniente que sea una piscina cubierta, aunque queramos ejercitarnos en verano, porque nos evitará que al salir del agua mojados experimentemos un cambio de temperatura brusco.
- La temperatura en ese caso debe estar entre 24 y 28 ºC la del agua, y entre dos y cuatro grados más la exterior, algo que no siempre se cumple en las instalaciones deportivas.
- Debe contar con un monitor. Aunque nuestra idea sea nadar por libre, siempre es conveniente que un profesional del ejercicio físico supervise nuestra actividad. En el caso de que no nos defendamos con mucha soltura en el agua, esta característica es fundamental, ya que necesitaremos que sea el profesional el que nos indique todos los pasos a seguir para ejercitarnos.
- Oferta de clases colectivas, ya que aunque podemos realizar ejercicio por libre, para las personas mayores resulta más recomendable que se ejerciten en grupo para crear lazos de unión, sociabilizarse y evitar las situaciones de soledad. Además, en estas clases nos garantizamos que el monitor ofrece un programa de ejercicios acorde a nuestra capacidad física.
- Disponga de material para ejercitarse, porque aunque no siempre es necesario, los elementos como balones, aros, maguitos, o aletas, pueden enriquecer la práctica deportiva.
Consejos para practicar ejercicios acuáticos en zonas de mar
Otra opción para realizar ejercicios acuáticos es acudir a un lugar de costa y aprovechar los beneficios del agua del mar. Y es que a todos los que ya hemos apuntado, tendremos que sumar los que proporcionan los oligoelementos y minerales –como el yodo, el potasio o el cinc, entre otros– que se encuentran en el medio marino, y que el organismo es capaz de absorber. Además, el efecto del oleaje sobre nuestro cuerpo favorece aun más la circulación.
Eso sí, si te decantas por esta opción debes adoptar ciertas precauciones para evitar riesgos, como:
Creado: 5 de julio de 2019