Consecuencias de no saber afrontar una entrevista de trabajo

La falta de capacidad para enfrentarse a una entrevista de trabajo puede hacer no solo que te cueste más de la cuenta encontrar empleo, algo ya de por sí difícil en los tiempos que corren, sino que además puede tener como consecuencia otros problemas laborales y personales:

Repercusiones a nivel laboral:

• Acceso a empleos de inferior categoría a los que la persona podría optar por su cualificación profesional.
• Falta de satisfacción laboral.
• Sufrir burnout (síndrome de estar quemado) resultado del sentimiento de estar trabajando en algo que está por debajo de sus posibilidades y no cumple sus expectativas.
• Problemas para ascender laboralmente, tanto a nivel económico, como en lo que tiene que ver con las tareas desempeñadas, debido a la dificultad para exponer sus motivos en la entrevista con sus superiores.

Repercusiones de no afrontar bien una entrevista laboral a nivel personal:

• Baja autoestima que, a su vez, actúa como estimulante de los niveles de ansiedad e inseguridad que siente la persona cuando debe enfrentarse a nuevas entrevistas de trabajo.
• Frustración.
• Vergüenza por no ser capaz de hacer algo que debería saber hacer, o culpa porque piensa que la entrevista le ha salido mal porque “ha metido la pata”, o “no ha sabido estar a la altura”.
• Desmotivación, indefensión y tristeza por no sentirse capaz de superar esta situación. La desmotivación es muy peligrosa, puesto que puede hacer que tiremos la toalla y dejemos de enviar currículos, no nos presentemos a las entrevistas, o lo hagamos desganados, etcétera.
• Ansiedad creciente cada vez que vuelve a fracasar.
• Irritabilidad, especialmente manifiesta con las personas en quienes confía.