Una nueva terapia contra la artrosis permite regenerar el cartílago

Diseñan una técnica contra la artrosis que permite administrar un fármaco directamente en el interior del cartílago y alcanzar los condrocitos, reduciendo su degeneración, y la inflamación y las alteraciones del hueso.
Mano con problemas de artrosis

05/12/2018

La artrosis es una enfermedad reumática degenerativa muy frecuente –se estima que alrededor de 300 millones de personas la padecen–, que se caracteriza por una progresiva degeneración de los cartílagos de las articulaciones, asociada a lesiones o al proceso de envejecimiento. Los tratamientos ayudan a aliviar los síntomas artrósicos –como el dolor o la inflamación–, pero una nueva terapia diseñada por científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) (Cambridge, EE.UU.), acaba de demostrar su capacidad para regenerar los cartílagos afectados en un estudio realizado con ratas.

PUBLICIDAD

Los medicamentos disponibles hasta ahora no penetran en el interior del cartílago, que es donde se encuentran los condrocitos o células que lo producen, por eso los autores del estudio, que se ha publicado en Science Translational Medicine, diseñaron un nanotransportador al que se une un fármaco llamado IGF-1 (factor de crecimiento insulínico tipo 1) –que estimula la producción de cartílago y el crecimiento de los condrocitos– y un compuesto denominado PEG, que permite que esta molécula se introduzca a través del cartílago y alcance los condrocitos.

Combinar el fármaco IGF-1 con el nanotransportador permitió que se mantuviera en el cartílago en concentraciones efectivas durante 30 días

Para comprobar si el método resultaba efectivo los investigadores inyectaron el nanotransportador con el medicamento en las articulaciones de las rodillas de ratas que habían desarrollado artrosis a causa de una lesión, y observaron que la terapia disminuyó la inflamación, la degeneración del cartílago y la aparición de alteraciones en el hueso asociadas a la enfermedad.

PUBLICIDAD

Una inyección cada dos o cuatro semanas

Además, confirmaron que combinar IGF-1 con el nanotransportador multiplicaba por 10 la vida media del fármaco en las articulaciones y permitió que se mantuviera en el cartílago en concentraciones efectivas durante 30 días, lo que indica que podría ser suficiente administrar este tratamiento con una inyección cada dos semanas, o una vez al mes.

Aún se desconoce si esta potencial nueva estrategia terapéutica contra la artrosis resultaría también eficaz en los seres humanos, y para ello primero habrá que probarla en otros animales más grandes, cuyas articulaciones sean más parecidas a las de las personas, antes de realizar ensayos clínicos con los pacientes, pero al probar el nanotransportador en cartílago de vaca se ha comprobado que puede atravesar hasta un milímetro de grosor en este tejido, lo que supone una escala similar a la de las articulaciones humanas.

PUBLICIDAD

Actualizado: 4 de mayo de 2023

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD