Acrofobia
La acrofobia es un miedo exagerado e irracional a las alturas que se basa en un temor patológico a caerse y morir. En algunos casos puede condicionar la vida del afectado y precisar tratamiento psicológico.

Tratamiento de la acrofobia

Pareja sentado en un lugar elevado
Las técnicas conductuales enfrentan al paciente con su fobia en situaciones reales
Enrique González

Por: Enrique González

Periodista experto en salud y bienestar

Actualizado: 21 de septiembre de 2022

Cuando la acrofobia o miedo a las alturas se convierte en un problema que afecta a nuestra vida cotidiana, es preciso acudir a un especialista que nos ayude a afrontar el problema. La acrofobia tiene solución, pero si no se trata adecuadamente puede agravarse e incapacitarnos para realizar determinadas actividades.

PUBLICIDAD

Actualmente existen diferentes tratamientos para abordar la acrofobia. En ocasiones el especialista recurre a fármacos como refuerzo de su consulta, pero la solución al miedo a las alturas realmente no se encuentra en las medicinas. Lo habitual es recurrir a una combinación de las terapias cognitiva y conductual, a las que se suman técnicas de relajación:

  • Cognitiva: consiste en ayudar al paciente a controlar sus emociones. El terapeuta ayuda al acrofóbico a profundizar en los motivos de su miedo y le invita a racionalizarlo. Se le hace comprender que no hay motivos reales para temer por su vida por el mero hecho de encontrarse en un lugar elevado.
  • Conductual: la terapia cognitiva suele combinarse con técnicas conductuales, en las cuales el paciente se enfrenta a su fobia en situaciones reales; es decir, se le expone a sus temores hasta que se acostumbra o comprueba que su vida no corre peligro. Dentro de la terapia conductual existen varias modalidades:
    • La más común es la desensibilización sistemática, en la que se somete al paciente a sus miedos de manera gradual.
    • Otra práctica es la inundación, más directa, en la que se sitúa a la persona en el contexto que más puede atemorizarla (por ejemplo, subir a la azotea de un rascacielos).
    • En los últimos años se han llevado a cabo investigaciones que defienden la validez de la realidad virtual para tratar la acrofobia. Los investigadores que apoyan este recurso aseguran que ofrece más posibilidades que la exposición en vivo y que presenta menos limitaciones.
  • Técnicas de relajación: con ellas, el acrofóbico aprende a controlar su estrés cuando se encuentra en la tesitura que le causa inquietud. Éstas pueden incluir ejercicios de respiración, meditación, o distensión de los músculos.

PUBLICIDAD

Las terapias cognitivo-conductuales consiguen ayudar al 75% de las personas que padecen una fobia como el miedo a las alturas, según el Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos.

Creado: 23 de octubre de 2014

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD