Las zoonosis causan 2,2 millones de muertes al año
09/07/2012
Un estudio realizado a nivel mundial por varios organismos internacionales –el ‘International Livestock Research Institute’ de Kenia, el Instituto de Zoología de Gran Bretaña, y la Escuela de Salud Pública de Hanoi (Vietnam)– revela que las zoonosis –enfermedades de los animales que pueden ser transmitidas a los seres humanos– ocasionan la muerte de alrededor de 2,2 millones de personas cada año en todo el mundo.
La investigación ha analizado 13 de las zoonosis que se transmiten con mayor frecuencia a los seres humanos, y ha recopilado en una lista las 20 zonas en las que de acuerdo a sus observaciones es posible que este problema de salud empeore. Y es que la mayor parte de las infecciones que se producen a causa de estas patologías, así como los fallecimientos que ocasionan, se concentran en los países menos favorecidos económicamente, especialmente en Etiopía, India, Nigeria y Tanzania, donde hay mayores tasas de propagación y mayor número de fallecidos por esta causa.
La mayor parte de las infecciones y muertes por zoonosis, se concentran en países pobres como Etiopía y la India, pero también existen ‘puntos calientes’ en Estados Unidos y Europa
Los autores del estudio advierten, no obstante, que también existen ‘puntos calientes’ en países desarrollados como Estados Unidos, y algunas zonas de Europa, donde se dan casos en los que estas infecciones son muy agresivas y están desarrollando resistencias a los fármacos que se emplean en su tratamiento, y que podrían convertirse, junto a Brasil y algunas zonas del sudeste asiático, en focos de ‘zoonosis emergentes’.
Una de las enfermedades animales que tiene más posibilidades de transmisión a humanos es la brucelosis, bastante frecuente en España, y que es provocada por una bacteria que suele infectar el organismo cuando se ingieren productos animales contaminados –sobre todo leche que no ha sido previamente esterilizada. Los investigadores estiman que en los países en vías de desarrollo, uno de cada ocho animales pueden estar afectados por brucelosis, lo que eleva peligrosamente las posibilidades de contagio a la población.
Los datos de la investigación revelan, además, que por lo menos la tercera parte de los casos de enfermedad diarreica que ocurren en el mundo se deben a enfermedades de animales y humanos, lo que convierte a esta afección en un serio problema de salud pública zoonótica.
Actualizado: 21 de febrero de 2017