El bebé duerme en casa ajena: cómo tenerlo todo bajo control
Actualizado: 29 de julio de 2022
Dejar a nuestro hijo con una persona de la máxima confianza y dormido plácidamente es la máxima aspiración de cualquier padre que se dispone a salir por la noche. A veces, sin embargo, las circunstancias hacen que sea necesario desplazar al bebé a otro domicilio; en ese caso tampoco pasa nada, simplemente tendremos que ser muy previsores y llevar todo lo que creamos que puede necesitar, desde una cuna portátil, hasta mudas, biberones, chupetes, etcétera.
Lo mejor es hacer una lista para no olvidarnos de nada, y recordad que en esa lista no debería faltar algún elemento que el pequeño pueda reconocer, como su peluche o cojín favoritos, que le proporcionen mayor seguridad y le hagan sentir casi como en su propia casa.
También conviene no llevar al bebé con prisas de última hora, es preferible acudir un buen rato antes y quedarnos hasta que observemos que está a gusto y tranquilo. Si ya es lo suficientemente mayorcito como para entenderlo, es mejor explicarle sin dramas lo que va a pasar, que mamá y papá van a salir, que le quieren muchísimo, y que se va a quedar con otra persona que le va a cuidar muy bien. “No conviene alargar la despedida con abrazos y besos que no acaban nunca, porque si no el niño va a pensar que pasa algo, cuando no es así”, advierte la psicóloga Leticia García Jérez, experta en niños y fundadora del gabinete Intervención psicológica para todos.
Y si ya estamos saliendo por la puerta y ese es el momento elegido por nuestro peque para ponerse a berrear, no os agobiéis, nada de darse media vuelta para calmarlo o averiguar qué le ocurre, nos vamos y punto; seguro que la persona que se queda con él sabrá qué hacer y diez minutos después estará tan tranquilo. ¡Ahora es momento de disfrutar de vuestra salida!
Creado: 5 de junio de 2018