Primera noche sin papás
La primera noche que la pareja sale tras el nacimiento de su bebé teme dejar al niño al cuidado de otras personas, aunque sean de confianza, pero seguir estos consejos evitará problemas y os permitirá disfrutar sin miedo.

Consejos para los familiares que se quedan al cargo del bebé

Alhelí Quintanilla, periodista

Por: Alhelí Quintanilla

Periodista especializada en bienestar, embarazo e infancia

Actualizado: 22 de septiembre de 2022

Cuando los padres deciden regalarse una primera noche sin hijos, las personas que se encargarán de cuidar al bebé, ya se trate de los abuelos, tíos, o cualquier otro familiar o amigo, han de ser conscientes de que contraen una importante responsabilidad, y por ello es importante que tengan en cuenta algunas recomendaciones para evitar sobresaltos tanto para ellos como para el pequeño:

  • Mostrarse tranquilos: aunque se trata de una novedad para el pequeño, es importante transmitirle confianza, comportarse con naturalidad, y explicarle tranquilamente, si el niño es mayor y pregunta por sus padres, que se han marchado pero volverán pronto.
  • Respetad los deseos de los padres, sobre todo en el caso de que seáis los abuelos, ya que es posible que haya diferencias sobre el modelo de crianza elegido, cómo se debe dormir a un bebé, por ejemplo, o arroparlo por la noche; no es el momento de discusiones, mejor conocer las reglas de los progenitores y aplicarlas.
  • Evitar riesgos: si el bebé viene a nuestra casa debemos cerciorarnos de que estará en un entorno seguro y de que contamos con todo lo necesario para su cuidado. También conviene comprobar que los teléfonos están cargados y el volumen audible.
  • Informaros sobre sus rutinas: lo mejor es que sepamos de antemano cuáles son los hábitos, costumbres y rutinas del bebé para que no nos pille desprevenidos. Si os sentís muy perdidos, acercaos unos días antes a su casa para pasar una tarde con él hasta que se quede dormido, porque este conocimiento seguro que os facilitará después su cuidado.
  • Mejor dos cuidadores: la tarea de cuidar a un bebé por parte de los abuelos se sobrelleva mejor si sois dos. Si no es posible por viudedad, por ejemplo, le podéis pedir a alguien que os acompañe, siempre con el permiso de los padres, claro. Además, ese día conviene estar descansado por si hubiera trajín nocturno.
  • Comodín de los padres: llantos desconsolados, una fiebre súbita…, si os sentís desbordados y no sabéis cómo actuar con el bebé, calma, llamad a sus padres porque es mejor que tomar decisiones precipitadas o con las que podrían no estar de acuerdo. Y, por supuesto, si se trata de una emergencia hay que contactar en seguida con el servicio correspondiente.

PUBLICIDAD

Creado: 6 de junio de 2018

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD