Qué es el cannabidiol (CBD): beneficios y para qué se usa
Actualizado: 4 de mayo de 2023
El cannabidiol (CBD) está de moda y cada vez son más los productos que se venden con el dibujo de la hoja de la marihuana en su envoltorio con la promesa de ayudar a paliar distintos problemas de salud. Sin embargo, es importante recalcar que los productos que se comercializan con la pertinente autorización contienen CBD, una parte del cannabis sin efecto psicotrópico o psicoactivo, es decir, no tiene efectos ni sobre el comportamiento ni en la conciencia, como los que sí produce la marihuana convencional, tal y como aclaran desde la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Cremas, maquillajes, aceites, chicles, gominolas, vaporizadores para cigarrillos electrónicos, e incluso supositorios que incluyan cannabidiol entre sus ingredientes se pueden encontrar ya en el mercado… e incluso en plataformas como Amazon. Y es que cada vez son más populares las propiedades beneficiosas del CBD para la salud, lo que ha hecho que la industria lo aproveche y comience a sacar multitud de productos dermofarmacéuticos, aunque también se usa como tratamiento oral para algunas enfermedades.
Lo primero que hay que saber es que “el cannabidiol es una de las 80 sustancias químicas que tiene la planta “Cannabis sativa”, nos explica María Jesús Escribano García, directora técnica-profesional del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM). Se trata de un compuesto natural presente en la flor resinosa que no contiene THC (tetrahidrocannabinol), que es la sustancia que dota del poder psicoactivo al cannabis, del efecto droga.
Según nos desvela José Antonio Sánchez, CEO de MEDCAN, un centro de información sobre el uso terapéutico del cannabis, “los productos con cannabidiol están en auge porque tienen escasa, casi nula toxicidad; además, tiene una multitud de efectos beneficiosos, ya que afecta a nuestro sistema endocannabinoide. No existen riesgos, es un tratamiento accesible y mejora la calidad de vida de los pacientes”.
Qué dice la ley sobre el cannabidiol (CBD)
La OMS no considera que el cannabidiol sea una sustancia que produzca adicción y le atribuye una serie de propiedades terapéuticas de las cuales algunas todavía no se han comprobado científicamente en estudios consolidados. Por ejemplo, entre los efectos que sí se han demostrado se encuentran sus efectos anticonvulsionantes, por lo que se está usando en niños y adultos con epilepsias refractarias y que no responden a otros tratamientos.
El consumo y uso del cannabidiol está permitido en España sin restricciones en el caso de productos cosméticos como cremas, ungüentos, bálsamos… José Antonio Sánchez indica que “en España, el cannabidiol se puede comercializar siempre y cuando vaya acreditado como cosmético y siempre por debajo del 0,2% de nivel de THC”.
Sin embargo, cuando se ingiere de manera oral, mediante cápsulas, comprimidos, jarabes o infusiones, se considera estupefaciente, por lo que entonces, según María Jesús Escribano García, “debe estar autorizado por la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios) por ser un medicamento para su administración oral”. Es el caso del fármaco Epidyolex, usado para tratar las crisis epilépticas en enfermedades como el síndrome de Lennox Gastaut o el síndrome de Dravet.
Para qué se usa el cannabidiol: beneficios del CBD
El cannabidiol puede presentarse en varios formatos, como en aceite, en cápsulas, gominolas, champús, cremas, ungüentos, supositorios… Según nos cuenta María Jesús Escribano García, directora técnica-profesional del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), el consumo del cannabidiol “reduce la hiperexcitabilidad neuronal mediante una modulación del calcio intracelular. Cuando se administra por vía oral se emplea en el tratamiento de convulsiones asociadas con el síndrome de Lennox Gastaut o el síndrome de Dravet”.
En España se ha aprobado el pasado septiembre el primer fármaco derivado del cannabidiol para tratar la epilepsia, concretamente de cara a los anteriores síndromes mencionados, Lennox Gastaut y Dravet. El fármaco, llamado Epidyolex, está recomendado a partir de los dos años de edad, y en los ensayos clínicos redujo hasta un 40% las crisis de ausencia.
Además, la experta también asegura que el CBD se está usando para el tratamiento de la espasticidad moderada a grave asociada a la esclerosis múltiple en pacientes que no han respondido a otros tratamientos, pues se ha visto que al ingerirlo mostraban mejorías clínicas.
Le hemos preguntado al Dr. Jesús de Santiago Moraga, médico especialista en tratamiento del dolor y coordinador del Grupo de Interés en Cannabinoides de la Sociedad Española del Dolor, sobre los casos en los que ya se está usando el CBD, contestándonos que “específicamente el medicamento a base de CBD (Epidiolex) ha demostrado su utilidad en casos de epilepsia refractaria. El cannabis medicinal en el caso de los pacientes oncológicos tiene evidencia como antiemético para las náuseas y vómitos por quimioterapia y para la espasticidad en pacientes con esclerosis múltiple. También mejora problemas transitorios del sueño en diferentes afecciones, favorece el aumento de apetito y la prevención de pérdida de peso en pacientes con VIH”.
Sumadas a los beneficios anteriores, José Antonio Sánchez nos explica que el cannabidiol tiene también las siguientes propiedades:
Relajante muscular
El CBD puede modular el equilibrio entre los neurotransmisores excitadores e inhibidores, lo que lleva a la relajación muscular. Un trabajo de la Universidad de Messina (Italia) analizó los efectos del cannabidiol en pacientes con esclerosis múltiple, concretamente de un fármaco que está aprobado en algunos países, llamado Sativex, y se demostró que era capaz de reducir la rigidez muscular, el dolor y los espasmos musculares. Además, es muy común ver cremas y ungüentos con CBD para dar masajes o aliviar lesiones musculares.
Analgésico
Los efectos que causa el cannabidiol en el sistema nervioso pueden reducir considerablemente el dolor, como por ejemplo en pacientes con artritis reumatoide. Así lo muestra un estudio publicado en el European Journal of Pain, en el que se expone que el gel de CBD transdérmico redujo significativamente la inflamación de las articulaciones, el dolor espontáneo, la infiltración de células inmunes y el engrosamiento de la membrana sinovial, en dosis de entre 6,2 y 62 mg.
Alivio fibromiálgico
En la misma línea, otro trabajo, publicado en enero de 2021, demostraba que el CBD reducía el dolor en personas con fibromialgia.
Reduce la ansiedad
Un estudio publicado en la revista Neurotherapeutics ha respaldado los efectos beneficiosos para la ansiedad de tomar dosis entre 300 y 600 mg de CBD, que demostró reducir la ansiedad y el miedo, por lo que podría usarse como complemento a las terapias cognitivo-conductuales.
Mejora el sueño
El cannabidiol puede ayudar a regular el ciclo sueño-vigilia, haciendo que el sueño sea más profundo y relajado. Una publicación en The Permanente Journal indica que el CBD calma el sistema nervioso central y es capaz de mejorar el descanso en las personas que lo toman. Sin embargo, todavía se tienen que hacer más estudios que determinen si la mejora en el sueño se debe a la reducción de la ansiedad, o si actúa directamente en el sueño.
Buen cicatrizante
La administración de pomada tópica con CBD podría ser una alternativa segura y eficaz para mejorar la calidad de vida de algunas personas con trastornos en la piel, pues parece ser que ayuda a mejorar la hidratación y la elasticidad de la epidermis en enfermedades como la psoriasis y la dermatitis atópica, además de haber demostrado ser un buen cicatrizante. Todo esto ha sido comprobado en un estudio llevado a cabo por la Facultad de Medicina de la Universidad de Módena y Reggio Emilia (Italia). La frecuencia con la que se aplicó el ungüento de CBD en la piel fue de dos veces al día durante tres meses, en los que se apreció una mejoría significativa.
Papel neuroprotector
Las personas con trastornos neurológicos podrían beneficiarse del consumo de cannabidiol, pues además de mejorar la rigidez muscular en la esclerosis múltiple o tratar la epilepsia, también parece ser eficaz en el tratamiento del párkinson, tal y como expone un estudio de la Queen’s University (Canadá), sin embargo, todavía no hay evidencia suficiente para apoyar su integración en la lista de tratamientos de los síntomas motores de la enfermedad. Esto se debe principalmente a la falta de datos de buena calidad. Otro estudio –hecho en roedores– de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Australia) también apuntaba a una mejora en la memoria en las personas con alzhéimer, aunque también requiere de más investigación.
Prevenir y mejorar el acné
La crema con cannabidiol puede ser un antiinflamatorio natural eficaz, por ejemplo en los casos de acné, pues una investigación publicada en The Journal of Clinical Investigation indica que “el CBD inhibe la proliferación de queratinocitos hiperproliferativos, y se demostró que posee una notable actividad antibacteriana. Aunque su eficacia contra las cepas de Propionibacterium acnes aún no se ha investigado, se puede especular que su supuesta actividad antibacteriana indirecta podría estar respaldada por efectos bactericidas directos, argumentando que es muy probable que el CBD se comporte como un potente agente anti-acné”.
Rebajar el estrés postraumático
El cannabidiol puede afectar al sistema endocannabinoide del cuerpo, y uno de los efectos que puede provocar es la reducción de los síntomas del estrés postraumático en adultos, según se explica en una investigación publicada en The Journal of Alternative and Complementary Medicine.
Reducir la tensión arterial
Son varios los estudios que han relacionado el cannabidiol con beneficios para la salud cardiovascular. Uno de ellos, que se ha incluido en la revista JCI Insight, ha revelado que 600 mg de aceite de CBD bajó la presión arterial en reposo, en comparación con el placebo. Otra investigación publicada en el British Journal of Clinical Pharmacology reveló que el CBD redujo la rigidez arterial y mejoró el flujo sanguíneo tras la dosis de esta sustancia.
Creado: 10 de diciembre de 2021
