La lactancia materna favorece el desarrollo cerebral de los prematuros

Alimentar con lactancia materna a los bebés prematuros nacidos con muy bajo peso aumenta los niveles de ciertas sustancias químicas que resultan clave para un correcto desarrollo de su cerebro.
Lactancia materna de una mujer a su bebé prematuro

30/04/2019

Las áreas cerebrales que intervienen en las actividades motoras y cognitivas complejas experimentan su mayor crecimiento en la última etapa del embarazo, y por ello el cerebro de los bebés prematuros puede experimentar un retraso en el crecimiento o un deterioro cognitivo. Ahora, una investigación ha revelado que alimentar a los niños que nacen prematuramente con lactancia materna –que les proporciona lípidos dietéticos, una importante fuente de energía– incrementa los niveles de creatina y los niveles de inositol en la materia blanca, lo que estimula el desarrollo del cerebro.

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Catherine Limperopoulos, directora de Investigación MRI del Desarrollo Cerebral en el Sistema Nacional de Salud Infantil de Estados Unidos, ha explicado que los resultados de estudios previos habían establecido que los prematuros alimentados con leche materna experimentaban una mejora en el volumen cerebral y en el neurodesarrollo, si bien no estaba claro el mecanismo por el que este tipo de nutrición beneficiaba el desarrollo del cerebro.

Lactancia materna versus lactancia artificial

Para llevar a cabo la nueva investigación, que se ha presentado en la reunión de la Pediatric Academic Societies, en Baltimore (EE.UU.), los científicos emplearon imágenes de resonancia magnética no invasiva para examinar los cerebros de 68 bebés nacidos con 32 semanas de edad gestacional y muy poco peso (menos de 1,5 kilos). Se centraron en analizar la materia blanca de la zona delantera derecha y el cerebelo, un área del cerebro involucrada en el equilibrio, la coordinación muscular y las funciones mentales superiores.

Los bebés prematuros alimentados con leche materna experimentaron una mejora en el volumen cerebral y en el neurodesarrollo cognitivo

Los investigadores midieron los macronutrientes acumulativos (proteínas, carbohidratos, lípidos y calorías) que ingirieron los neonatos a las dos y las cuatro semanas de vida. Al comparar a los bebés alimentados con lactancia materna con aquellos a los que se suministró lactancia artificial, observaron que los primeros tenían niveles significativamente más elevados de inositol en la materia blanca del cerebro, y también niveles mucho más elevados de creatina. De hecho, el porcentaje de días que los pequeños fueron alimentados con leche materna se asoció con un significativo incremento en los niveles tanto de creatina como de un nutriente soluble en agua denominado colina.

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Katherine Ottolini, directora del estudio, ha declarado que la creatina facilita el reciclaje de la adenosina trifosfato (ATP), que contribuye a un mayor nivel de energía en las células, y que la presencia de mayores cantidades de este metabolito significa que las células cambiarán y madurarán con mayor rapidez. La colina, por su parte, es un marcador de la renovación de la membrana celular y cuando se generan nuevas células aumentan sus niveles.

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Actualizado: 30 de abril de 2019

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