'Tittooing', la moda de tatuarse los pezones

Un nuevo capricho estético, que se puso de moda hace unos meses entre las mujeres de Liverpool, es el tittooing, que consiste en tatuarse los pezones para definirlos o alterar su forma y color, por razones únicamente estéticas, aprovechando una técnica que se empezó a utilizar para completar una reconstrucción mamaria tras una mastectomía.

Y es que el tittooing tiene sus orígenes en la micropigmentación paramédica, una terapia complementaria de la cirugía reparadora que se realiza tras la mastectomía, e indicada para mejorar el aspecto estético de las mamas reconstruidas tras la extirpación quirúrgica a la que se suele recurrir en el tratamiento del cáncer de mama.

Para las pacientes de cáncer de mama, el hecho de recuperar el aspecto normal de sus pechos tras los tratamientos, las ha ayudado psicológicamente y les ha permitido en muchos casos recuperar su autoestima. Gracias a la micropigmentación se consigue incluso dar al pezón y a la areola dibujados la apariencia de tener dimensión.

El tittooing se realiza bajo anestesia local y sus resultados duran entre 12 y 18 meses

Ahora, como ha ocurrido con diversas terapias que inicialmente se desarrollaron con otros fines, ha surgido el tittooing para que todas aquellas mujeres que están descontentas con el color o forma de sus pezones tengan la posibilidad de modificarlos o definirlos, siempre que se puedan permitir abonar los alrededor de 1.400 euros que cuesta la intervención.

Para realizar este tipo de tatuaje se emplea anestesia local, y se tarda aproximadamente dos horas. Es importante señalar que se trata de un procedimiento doloroso debido a la extremada sensibilidad de la zona, y que los resultados no son permanentes, sino que el nuevo look de tus pezones solo se mantendrá entre 12 y 18 meses.