Tratamiento de la infección por virus respiratorio sincitial

El lavado nasal con suero fisiológico favorece la expulsión de la mucosidad.
Actualizado: 8 de enero de 2025
No hay un tratamiento específico para la bronquiolitis provocada por el virus respiratorio sincitial (VRS), ya que al ser una infección vírica no se trata con antibióticos. Para controlar sus síntomas, el pediatra explicará a los padres una serie de pautas generales, como por ejemplo:
En la mayoría de los casos, la infección por el virus respiratorio sincitial no requiere ingreso y se puede manejar en el domicilio, apreciándose una mejoría progresiva del paciente a partir del tercer o cuarto día de evolución. En total, el cuadro suele durar entre una semana y diez días, aunque la tos residual puede mantenerse incluso semanas.
En el caso de los recién nacidos, bebés muy pequeños, o los que presenten mucha dificultad respiratoria con necesidad de administrar oxígeno, requerirán ingreso en el hospital. Si la evolución es desfavorable pueden llegar a requerir intubación y ventilación mecánica mediante respiración artificial y administración de líquidos por vía intravenosa para mantener hidratado al paciente, como señalan desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
Los expertos de los CDC recuerdan que este virus es el principal responsable de bronquiolitis (inflamación de las vías respiratorias pequeñas de los pulmones) y neumonía (infección de los pulmones) en niños menores de un año y recomiendan la vacunación para prevenir complicaciones.
Aunque la evolución suele ser favorable y en la mayoría de las ocasiones la infección por VRS cura sin secuelas, los bebés que han pasado una bronquiolitis por VRS tienen más riesgo de presentar durante la infancia hiperreactividad bronquial, es decir, episodios de sibilancias coincidiendo con resfriados, que suelen remitir antes de llegar a la adolescencia.
Creado: 1 de abril de 2014