La neverita es el elemento clave para mantener todo lo que nos llevemos a la playa bien fresquito y conservado en buenas condiciones. Aquí tienes algunos trucos para mantenerla en buen estado y sacarle el máximo partido:
- La nevera debe ser grande para poder colocar la comida cómodamente sin que se aplaste o se mezcle, así el frío se repartirá por todo el espacio y actuará correctamente, evitando que la comida se estropee.
- Si la comida no está fría no se enfriará por mucho hielo que le pongamos. Un truco es preparar la comida por la mañana y meterla un rato en el congelador para que se enfríe.
- Coloca la comida en recipientes cerrados o envuelta en plásticos, así la aislarán del hielo que la rodea y se mantendrá fría.
- Es más seguro consumir los alimentos mientras el hielo no se derrita y estén frescos al tacto.
- Mete las cosas a última hora.
- Abrir la nevera muchas veces, aunque seas poco tiempo, implica una gran pérdida de la cadena del frío, hazlo sólo cuando sea necesario.
- Lleva las bebidas separadas de la comida, ya que en la playa se bebe mucho, de este modo la nevera donde estén los alimentos se abrirá menos y estos se conservarán mejor.
- Al llegar a la playa, sitúala a la sombra.
- No olvides unas bolsas de plástico para recoger la basura y dejar la playa limpia cuando te marches.