Crema de cacahuete casera, receta y usos en la cocina
Actualizado: 4 de mayo de 2023
La manteca o mantequilla de cacahuete o de maní es típicamente americana, pero ahora puedes disfrutar una versión saludable en tu hogar con una receta de esta crema, que es fácil de untar y está hecha solo con cacahuetes naturales, no tiene azúcar ni grasas de palma o coco, y es tan apetitosa y fácil de hacer que vas a tener que poner un candado al bote si no quieres que se acabe en un abrir y cerrar de ojos.
Cómo preparar tu propia crema de cacahuete casera
Para hacer esta receta solo necesitas un ingrediente: los cacahuetes tostados naturales –sin azúcar ni sal–. Si no los encuentras tostados, te explicamos dos formas para que puedas tostarlos en casa en unos minutos. Verás lo fácil que resulta hacer esta crema en casa.
Receta de crema de cacahuete casera
- 250 gramos de cacahuetes naturales, tostados y pelados.
- Un procesador de alimentos o robot de cocina potente.
- Algo de paciencia para conseguir la textura deseada (pasta lisa y sin grumos).
- 1/4 cucharadita de sal (opcional)
- 1-2 cucharadas de aceite de cacahuete o aceite vegetal neutro (opcional)
Si no encuentras cacahuetes tostados, puedes tostarlos tú de dos maneras. La primera opción es hacerlo en el horno. Pon en una bandeja de horno una lámina de papel de hornear. Distribuye los cacahuetes bien extendidos por la bandeja y hornéalos durante 5-10 minutos a 170 ºC. Cuando pase la mitad del tiempo abre y remueve para que se tuesten por igual. Es muy importante no perder de vista el horno porque pueden quemarse en cuestión de minutos. Cuando ya huela a tostado (no a quemado) sácalos y ponlos extendidos en una superficie fría para que no sigan cociendo. La segunda forma de tostar los cacahuetes es hacerlo en la sartén. Tendrás que hacerlos por tandas. Coloca unos pocos sobre la sartén, sin echar aceite ni nada y deja que se vayan tostando a fuego medio-bajo unos minutos hasta que estén dorados. Solo tienes que estar pendiente de que no se peguen y de que se tuesten más o menos por igual, para ello, tendrás que remover frecuentemente.
Añade los cacahuetes en una picadora eléctrica –que sea potente (a partir de 600 W), ya que se puede quemar o romper– y bate durante 2-3 minutos hasta obtener una crema de tu agrado. ¡Cuidado! Cuanto más tiempo la dejes batiendo, más líquida estará.
Si deseas una crema de cacahuete más suave, agrega aceite de cacahuete o aceite vegetal neutro a la mezcla mientras se procesa. Agrega una cucharada a la vez hasta obtener la consistencia deseada. Si quieres obtener una crema de cacahuete salada, agrega la sal a la mezcla y procesa durante otros 30 segundos.
Guarda la crema en un recipiente de cristal hermético en la nevera. Ten en cuenta que se endurecerá, así que sácala un poco antes de consumirla para que se atempere. Aguanta perfecta 2-3 semanas. Es normal que con el paso de los días parte del aceite suba a la superficie, pero solo tienes que volver a mezclarla para unificarla.
Consejos para personalizar tu crema de cacahuete
El sabor natural del cacahuete es muy intenso al ser una manteca que solo contiene este ingrediente, pero si te gusta darle un toque más dulce, salado o crujiente, puedes tunear tu crema en segundos para conseguir diferentes variedades.
Ten en cuenta que esta crema de cacahuete casera es más saludable que las opciones comerciales, ya que no contiene conservantes ni aditivos. Además, puedes controlar la cantidad de sal y aceite que utilizas para hacerla. Sin embargo, recuerda que los cacahuetes son altos en calorías, por lo que debes consumir esta crema con moderación si estás controlando tu ingesta de calorías.
Usos de la mantequilla de cacahuete en la cocina
Puedes usar la crema de cacahuete en multitud de recetas y platos, tanto dulces como salados, que gracias a su incorporación ganarán en aroma, sabor y originalidad respecto a las preparaciones tradicionales. Te damos algunos ejemplos:
En tostadas de desayuno o merienda
Unta una cantidad generosa de crema de cacahuete encima del pan tostado aún caliente. Puedes ponerle la fruta que más te guste encima.
Como relleno de sándwiches o bocadillos
La opción más conocida es la que se mezcla con mermelada de arándanos o fresas, pero también puedes ponerle rodajas de plátano, aguacate, queso tipo requesón o brie, o crema de chocolate.
Sobre rodajas de fruta
Le va bien la manzana, la pera, el mango o el plátano. Solo tienes que cortar la fruta en rodajas, colocarla en un plato, ponerle unos hilos o untar crema de cacahuete encima y… ¡listo para un tentempié saludable!
Para hacer repostería
Solo una o dos cucharadas de mantequilla de cacahuete casera será el ingrediente secreto perfecto para darle un toque único a tus bizcochos, tartas, magdalenas, brownies o galletas.
Para aliños y salsas
A las recetas orientales le va muy bien; de hecho, es un ingrediente muy utilizado en muchas de ellas. Puedes hacer una salsa vietnamita con miel, crema de cacahuete, lima, aceite de sésamo, salsa de soja y jengibre. O un aliño con zumo de naranja y un poco de salsa de soja. Pruébala también directamente en ensaladas variadas, o para mojar con palitos de verduras crudos.
Para hacer hummus
La crema de cacahuete es un perfecto sustituto del tahini, la pasta de sésamo con la que tradicionalmente se prepara este plato típico de la gastronomía árabe.
Nutrientes del cacahuete
Aunque esta receta de mantequilla de cacahuete sea natural, sin azúcares ni grasas añadidas (solo tiene las del cacahuete), no se te puede olvidar que a pesar de que este alimento pertenece a las familias de las legumbres (sí, es una leguminosa) sus características nutricionales son más parecidas a las de los frutos secos y, por ello, se suele meter en este mismo grupo.
Es cierto que los cacahuetes tienen nutrientes interesantes, y según la Fundación Española de la Nutrición en cada 100 gramos de porción comestible hay 23,4 de ácidos grasos monoinsaturados y 14 gramos de poliinsaturados calificadas como grasas de buena calidad. Además, es un alimento rico en proteínas vegetales, al aportar 27 gramos, y en fibra (8,1 gramos). Su contenido en minerales también es notable: fósforo (432 miligramos), potasio (680 miligramos), magnesio (174 miligramos) y cinc (3 miligramos). Siendo un alimento muy interesante en la alimentación por su alto aporte nutritivo concentrado en un volumen pequeño.
Pero esta crema –por muy realfooding e instagrameable que sea– es también muy energética, así que conviene no excederse en el consumo. Lo mejor, tomarla cuando necesites un extra de energía cuando vayas al gimnasio, para recuperarte tras una sesión de deporte, o porque te espera un día de mucha actividad.
¿Y la cantidad? Puedes untar generosamente esta crema en una tostada o añadir 1 cucharada sopera (unos 25-30 gramos) a un yogur, a tu bol de fruta o a una ensalada, 2-3 veces por semana, como recomienda el nutricionista Carlos Ríos en su cuenta de Realfooding de Instagram: “Por su palatabilidad y alta densidad calórica mi recomendación es que la crema de cacahuete no sea de consumo diario, sino semanal. Combínala con fruta, por ejemplo, y no te olvides de entrenar o moverte a lo largo del día”.
¿Puedo dar crema de cacahuete a los bebés y niños?
Por último, una pequeña advertencia, sobre todo si quieres dar esta crema de maní a los niños. Según la Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex (AEPNAA) entre las legumbres que más alergias alimentarias provocan en la población infantil se encuentra el cacahuete con un 33% de afectados, por detrás de la lenteja (78%) y el garbanzo (72%), como responsable de la mayoría de las reacciones alérgicas. Siendo, además, “la leguminosa que puede desencadenar una sintomatología más grave, como el shock anafiláctico” como confirma la nutricionista Raquel Bernacer.
Para evitar tantos casos de alergia en niños provocados por el cacahuete, la recomendación de la Asociación Española de Pediatría (AEP) –según los estudios sobre este tema de los últimos 70 años– es introducir el cacahuete antes de los 11 meses para disminuir el riesgo de desarrollar alergia, y así lo certifican estudios nacionales e internacionales.
Recuerda que “los bebés y niños menores de 4-5 años no deben tomar frutos secos ni cacahuetes enteros ni en trocitos por el riesgo de atragantamiento”, tal y como recuerda la pediatra Lucía Galán en su página web.
Entonces, ¿cómo se puede introducir el cacahuete en la dieta de los niños? Puedes añadir o disolver una pequeña cantidad de mantequilla de cacahuete natural (sin sal, azúcar ni grasa añadida, como la que te proponemos en esta receta) a sus biberones de leche o a cualquier papilla de frutas, de cereales o en el yogur, tal y como indica la American Academy of Pediatrics, aunque ya sabes que lo mejor siempre es que lo consultes con tu pediatra de confianza que es quien mejor puede orientarte sobre la dieta de tu hijo.
Creado: 3 de junio de 2020