Ver imágenes de comida en el móvil puede ayudar a saciar tu apetito

En internet abundan las imágenes de apetitosos alimentos con la intención de inducirnos a su consumo, pero un estudio ha comprobado que mirar repetidamente fotos de comida en tu móvil puede ayudarte a experimentar sensación de saciedad.
Un hombre obeso mirando dulces desde su móvil

23/05/2023

El objetivo de la publicidad es despertar nuestro deseo por obtener aquello que nos muestra, da igual si se trata de ropa, un coche, o el destino de vacaciones soñado. Sin embargo, un estudio ha comprobado ahora que en el caso de la comida podría tener el efecto contrario y que, al ver imágenes de alimentos, sobre todo si lo hacemos de manera reiterada, podemos experimentar sensación de saciedad, un hallazgo que podría tenerse en cuenta a la hora de diseñar un plan de adelgazamiento.

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De hecho, internet está lleno de anuncios de productos alimenticios que se han subido a la red con la finalidad de llamar la atención de los consumidores para que estos los adquieran. Su intención es que, al ver la fotografía de una hamburguesa en redes sociales como Instagram o Facebook, nos entre hambre y nos apetezca comernos una de Burger King o McDonalds, por ejemplo, pero la investigación –que ha sido realizada en la Universidad de Aarhus (Dinamarca)– ha revelado que ver la misma imagen de un alimento más de 30 veces puede desencadenar sensación de saciedad.

“En nuestros experimentos, demostramos que cuando los participantes vieron la misma imagen de comida 30 veces, se sintieron más satisfechos que antes de haber visto la imagen. Los participantes a los que se les mostró la imagen muchas veces también eligieron una porción más pequeña que aquellos que solo habían visto la imagen tres veces, cuando posteriormente les preguntamos sobre el tamaño de la porción que querían”, ha declarado Tjark Andersen, que recientemente defendió su doctorado en el Departamento de Ciencias de la Alimentación de la Universidad de Aarhus.

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Engañar al cerebro como una posible estrategia para perder peso

Andersen ha explicado que, aunque pueda parecer raro que los participantes del estudio se sintieran llenos sin haber comido nada, se trata de algo bastante natural porque la forma en la que pensamos sobre la comida influye mucho en nuestras ganas de comer: “Tu apetito está más estrechamente relacionado con tu percepción cognitiva de lo que la mayoría de nosotros pensamos”, afirma.

“Las imágenes de diferentes tipos de comida no tienen el mismo efecto sobre la saciedad. Esa es la razón por la que puedes sentirte satisfecho después del plato principal, pero aún tienes espacio para el postre”

La teoría de la cognición fundamentada lo explica.  Por ejemplo, si te imaginas hincando los dientes en una jugosa manzana, se estimulan las mismas áreas del cerebro que si realmente le das un mordisco a una manzana. “Recibirás una respuesta fisiológica a algo en lo que solo has pensado. Por eso podemos sentirnos completamente satisfechos sin comer nada”, añade.

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Estudios anteriores ya habían demostrado que podemos sentirnos satisfechos solo con mirar imágenes de comida, pero en el nuevo trabajo se analizó cuál era la cantidad de visionados necesarios y si la variación en las imágenes eliminaba la sensación de saciedad. “Sabemos por estudios anteriores que las imágenes de diferentes tipos de comida no tienen el mismo efecto sobre la saciedad. Esa es la razón por la que puedes sentirte satisfecho después del plato principal, pero aún tienes espacio para el postre. Las cosas dulces son un tipo de comida completamente diferente”, dice Tjark Andersen.

Andersen y su equipo reclutaron a 1.149 personas para realizar experimentos en línea. Primero mostraron una imagen de M&Ms de color naranja. A algunos de los participantes les enseñaron la imagen tres veces y a otros 30 veces. Cuando se les preguntó cuántos M&Ms querían, entre 1 y 10, los que habían visto 30 imágenes pidieron una menor cantidad que los otros.

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Después repitieron el experimento, pero en esta ocasión los M&Ms que mostraron eran de distintos colores, y el resultado no varió. Finalmente, sustituyeron los M&M por Skittles que, a diferencia de los M&S, tienen un sabor diferente dependiendo del color. “Si el color no desempeñó un papel, debe ser el sabor imaginado, pero tampoco encontramos ningún efecto importante aquí. Esto sugiere que deben cambiar más parámetros además del color y el sabor antes de que podamos tener un efecto sobre la saciedad”, explica el investigador.

Los resultados se han publicado en Science Direct y, en opinión de Andersen, podrían ser útiles para desarrollar métodos para controlar el apetito y perder peso. Pone como ejemplo desarrollar una aplicación basada en una búsqueda de Google para pizza: “Abres la aplicación, eliges pizza, y muestra muchas fotos de pizza mientras imaginas comerla. De esta manera, podrías tener una sensación de saciedad y quizás dejar de querer pizza”.

Actualizado: 23 de mayo de 2023

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