La actividad cerebral intensa diurna aumenta la necesidad de sueño

Mantener una actividad cerebral intensa durante el día, independientemente del tiempo que se permanezca despierto, parece incrementar la necesidad de dormir, según un estudio realizado con peces cebra.
Actividad cerebral

17/09/2019

El sueño se regula mediante dos sistemas: el circadiano y el homeostático, pero mientras el funcionamiento de los ritmos circadianos –el reloj biológico del cuerpo que interviene en los ciclos de sueño y vigilia– se conoce bastante bien, no ocurre lo mismo con el sistema hosmeostático, que provoca la sensación de cansancio acumulado que experimentamos tras un día muy ajetreado o una noche sin dormir.

PUBLICIDAD

Por ello, científicos de la University College London (UCL) han realizado un estudio con larvas de peces cebra para comprender los mecanismos cerebrales que impulsan el control homeostático del sueño, independientemente del momento del día, y han descubierto que una intensa actividad del cerebro conllevaba una mayor necesidad de sueño.

Se utilizaron peces cebra debido a que sus cuerpos casi transparente facilitan su observación, pero también por sus similitudes con los humanos, como el hecho de que duerman cada noche. Para realizar el experimento, cuyos resultados se han publicado en Neuron, los investigadores incrementaron su actividad cerebral suministrándoles diversos estimulantes, incluyendo cafeína.

Posible diana terapéutica para combatir trastornos del sueño

Descubrieron así que los ejemplares cuya actividad cerebral se había intensificado inducida por estas sustancias durmieron durante más tiempo, una vez que las drogas dejaron de hacer efecto, lo que demuestra que el aumento de la actividad del cerebro provoca una mayor necesidad de dormir, y podría explicar por qué las personas se sienten exhaustas tras sufrir convulsiones.

El aumento de la actividad del cerebro provoca una mayor necesidad de dormir, y podría explicar por qué las personas se sienten exhaustas tras sufrir convulsiones

Un área concreta del cerebro de los animales resultó especialmente afectada por el sueño. Esta zona es similar a una región del cerebro humano situada en el hipotálamo, que interviene en la regulación de los ciclos de sueño y vigilia, y también comprobaron que una molécula denominada galanina desempeña un importante papel en la regulación del sueño homeostático, lo que puede ayudar a comprender los trastornos del sueño y problemas de salud que deterioran esta función esencial, como el alzhéimer.

PUBLICIDAD

La Dra. Sabine Reichert, investigadora del departamento de Cell & Developmental Biology de la UCL, ha declarado que es posible que hayan identificado una diana terapéutica para combatir los trastornos del sueño que podría contribuir al desarrollo de terapias que actúen sobre la galanina.

Actualizado: 4 de mayo de 2023

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD